El bipartito logra disolver la comisión sobre el caso PGOU gracias a la abstención de Vox

Alicante

Pleno en el Ayuntamiento de Alicante, el último del curso político antes de las vacaciones. Una sesión en la que el bipartito, gracias al voto de calidad del alcalde, ha conseguido disolver la comisión municipal para depurar responsabilidades políticas derivadas del presunto amaño del Plan General. Una comisión que para el equipo de gobierno ya no tenía sentido al haber dictado ya los tribunales sentencia absolutoria por el caso PGOU.

Sin embargo, desde la oposición, incluida la ultraderecha, han criticado los palos en las ruedas que ha puesto, especialmente el PP dicen, a esta comisión desde un principio. Y recuerdan que se suprime ahora sin haberse convocado ni una sola vez en más de un año desde que fue aprobada en Pleno.

Finalmente, el bipartito ha ganado la votación porque Vox se ha abstenido y ese voto de calidad de Barcala ha decantado la balanza a favor del bipartito. La portavoz popular, Mari Carmen de España, ha criticado la presión recibida todos estos años por la izquierda a quien ha acusado de usar este caso con fines partidistas y hacer juicios paralelos, independientemente del dictamen de los tribunales.

Por su parte, la oposición en bloque, también Vox, han afeado al bipartito que no respete los acuerdos plenarios y que, en más de un año desde que se aprobó, no se haya convocado ni una sola vez la comisión sobre el PGOU. "Eso sí es darle un uso partidista a las instituciones", critican.

Recuerdan que la sentencia no es firme y que, además, el propio Enrique Ortiz reconoció en un principio el amaño del Plan General, pero posteriormente se desdijo por una estrategia judicial que, parece ser por la última sentencia dictada, era la más correcta para los intereses del empresario.

Escuchamos a la socialista Trini Amorós; a Xavi López, de Unidas Podemos; a Natxo Bellido, de Compromís; y a Mario Ortolá, de Vox.

La abstención de Vox ha permitido al bipartito disolver esta comisión, aunque Barcala y su equipo no han podido valerse de nuevo de los votos de la ultraderecha para bloquear otra comisión. En este caso, una propuesta por Unidas Podemos para el control municipal de la recogida de residuos, que ha contado con el apoyo del resto de la oposición. Se pretende averiguar si el vídeo publicado en redes sociales en las que un camión de la adjudicataria mezclaba residuos de distinto tipo es una práctica habitual por parte de la UTE o algo puntual.

Otros asuntos

Mucho más amables han sido las intervenciones de los grupos durante el debate sobre la aprobación inicial de la primera ordenanza municipal que regulará las fiestas populares de la ciudad.

Una normativa que ha salido adelante gracias a los votos a favor de toda la corporación, excepto Unidas Podemos, que la ha rechazado por, entre otras cuestiones, no prohibir festejos en los que sufran los animales.

El edil del área, Manuel Jiménez, ha destacado que esta normativa es un ejemplo de consenso ya que, asegura, se ha negociado con los festeros, la ciudadanía en general y con el resto de los grupos municipales, aceptando muchas de sus propuestas.

El resto de grupos de la oposición ha agradecido la voluntad de diálogo de la concejalía de Fiestas y lo han puesto como ejemplo de que se pueden alcanzar acuerdos si el bipartito se sienta a negociar.

Eso sí, echan en falta, tal y como destacaba un informe de la Concejalía de Igualdad, un protocolo específico contra las agresiones machistas. Unidas Podemos va más allá y, a pesar de destacar el diálogo, han rechazado la norma porque no se garantiza la paridad en órganos como los jurados ni se prohíben actividades que supongan sufrimiento animal, como la vaquilla de El Moralet.

Lo explican Manuel Marín, del PSOE, Natxo Bellido, de Compromís, y Vanessa Romero, de Unidas Podemos.

Por otra parte, el Pleno también ha dado luz verde a una declaración del bipartito en la que se insta a la Generalitat a agilizar la vacunación, aplicando el sistema de cita previa y ampliando el horario a las 24 horas del día.