La construcción sale reforzada de la pandemia

Aranda de Duero

La construcción siempre ha sido uno de los pilares de la economía. Hace poco más de 10 años fue la gran golpeada en la crisis económica, pero se ha recuperado. Y ahora se ha convertido en el motor de la recuperación. Así lo esgrimen en nuestro tiempo con FAE Asemar el director gerente del Grupo CHR, Miguel Riesgo, y el gerente de Reformas Grupo Cid, Rubén Calleja, que también advierten de la falta de mano de obra y del problema que esta cuestión puede generar.

"Falta personal. En la crisis anterior se colocó mucho personal en otros sectores, cuesta encontrar personal cualificado. Nosotros por ejemplo hemos intentado de solventar esa dificultad formando al personal cuando vemos que tiene actitudes, pero es verdad que es difícil", explica Calleja, que muestra que "todo el gremio en general necesita profesionales, alicatadores, electricistas, fontaneros...".

"La gente joven no piensa en la construcción como un sector de aprendizaje y de formación. En este país tenemos un 40% de paro juvenil, pero apenas hay gente que quiera trabajar. El 90% que se forma tiene trabajo inmediato, el sector apunta y va a apuntar más. Lamentablemente hay pocas vías de formación, las propias empresas estamos formando al personal y la principal vía es la Formación Profesional, porque parece que si no hay una carrera de por medio no somos una persona que esté socialmente aceptada. La FP es el futuro y debemos potenciarla desde ya porque se avecina un problema serio, y ya no solo desde el mundo de la construcción", refleja Riesgo.

Aumentan las reformas

Las reformas han notado un boom muy llamativo. "El sector se ha disparado, la gente con la pandemia se ha dado cuenta de que hay que invertir en el hogar. El primer beneficiado somos nosotros porque le damos valor si estamos a gusto en ella, cómodos, pero si el día de mañana no es lo mismo si la vendemos el hecho de que esté reformada o no. Tantos días en casa ha hecho que la gente haga la casa que siempre han pensado. Pero también ha cambiado la filosofía; nosotros vamos con lista de espera para cualquier reforma, y para hacer un baño o cocina estamos dando lista de espera hasta noviembre. Cuando empezó la pandemia no sabíamos quién querría meter obreros en casa. Ahora tenemos entre cinco y seis casas abiertas a la vez", explica Calleja.

Riesgo da fe de lo que comenta Calleja y añade "el asunto de la eficiencia energética". "Todo el mundo quiere tener más eficiencia, es normal que la gente apunte hacia el consumo y el ahorro, y más con los precios que hay ahora de la luz. La gente ha cambiado la forma de pensar, y es normal que la demanda se haya concentrado. Y las preferencias también han cambiado en la vivienda nueva, desde la pandemia ha acelerado las tendencias; los espacios libres, terrazas... Ahora mismo todos los nuevos edificios que proyectamos ya no les concibo sin una terraza, es impensable. De hecho si les hay pensamos que no los vamos a vender", añade.

PGOU y trabas

Sobre el PGOU también ha hablado Riesgo. "Llevamos meses parados y esperamos tener la aprobación en septiembre pero es que es fundamental. Hay una compra contenida de vivienda nueva en Aranda brutal. Toda esta gente está esperando a proyectos que se han lanzado y están vendidos y no se pueden dar comienzo aún por la falta de licencia. Y sobre el sector las administraciones van a jugar un papel fundamental. Todo esto necesitará además trabajadores que ni están ni se les espera. La administración puede poner medios de formación y ella se encargará de administrar los permisos. Todos tenemos que ponernos las pilas para aprovechar esta oportunidad".

Por su parte, Calleja expresa que "desde la administración si apostara un poco en la formación de los jóvenes, yo considero que harían un triple bien; formar esa gente, darle un futuro y dar apoyo a un sector que está en auge y que es motor. Si la construcción tira, tiran los sectores de alrededor".