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Alcaldes de la Comarca se enfrentan a Abanca ante el cierre masivo de sucursales

Cajeros automáticos de Abanca / Cadena SER

Pontevedra

Alcaldes de la Comarca hacen un frente común contra Abanca ante el cierre masivo de sucursales, especialmente en zonas del rural. Es el caso de Poio o de Campo Lameiro que también se suma a la lista de negra de Abanca. En ella están Soutelo de Montes (Forcarei), Carballedo (Cerdedo-Cotobade), Seixo (Marín), Campelo (Poio), Carril y Vilaxoán (Vilagarcía de Arousa), localidades donde ya cerrarón o están anunciados cierres de sucursales.

De esta polémica habló esta mañana el Presidente de la Xunta en Pontevedra, tras el acto de homenaje a los deportistas olímpicas.

Núñez Feijóo lamentó estos cierres de sucursales de los que culpó al Gobierno Central por no aprobar una ley que lo impida; y anunció que la Xunta ayudará a los concellos afectados para que al menos puedan contar con cajeros automáticos.

Por su parte, los alcaldes afectados han mantenido contactos en las últimas horas para tomar medidas conjuntas. Algunos de ellos plantean un boicot a esta entidad, amenazando con retirar el dinero de los concellos depositado en las mismas, y pidiendo a la población que haga lo mismo, para que los cierres tengan un elevado coste económico para Abanca. El último caso es el de Campo Lameiro. Abanca comunicó ayer el cierre de la sucursal para el 8 de septiembre, lo que ha motivado ya el rechazo frontal de su alcalde Carlos Costa, del PP.

El regidor convocó una Junta de Portavoces urgente y anuncia un pleno extraordinario para tomar medidas, incluidas movilizaciones.

El alcalde, tras reunirse con empresarios locales, no oculta su indignación con la decisión de Abanca que califica como “agresión sin precedentes contra el rural”, especialmente en este caso, dado que esta sucursal es la única que existe en Campo Lameiro.

El regidor popular manifestó en Radio Pontevedra que el cierre de la misma afectará de manera “muy grave al municipio, especialmente a los mayores que tendrán que desplazarse a otros municipios para poder retirar el dinero de sus pensiones”.

Recordemos que ayer la corporación de Poio también decidió emprender acciones ante el cierre de la sucursal de Abanca de Campelo.

La Junta de Portavoces decidió ayer solicitar una reunión con los responsables territoriales de la entidad, para exigirles que se mantengan operativas todas las sucursales que hay en Poio, además de solicitar la instalación de un cajero automático en Raxó.

Por su parte, el alcalde de Cerdedo-Cotobade, Jorge Cubela, también afectado por los cierres de Abanca, facilitó a través de las Redes Sociales su apoyo al alcalde de Campo Lameiro. Cubela manifestó su rechazo a los cierres de sucursales, por considerar que se trata de un atentado contra el rural gallego, al tiempo que pide “unidad política entre todos los alcaldes para hacer un frente común”.

También el alcalde de Pontevedra se suma a als críticas contra Abanca. Fernández Lores asegura que también se están produciendo cierres de sucursales en las ciudades, aunque son menos traumáticos que el rural. El regidor nacionalista recuerda que la banca es un servicio público y que por ello no debería permitirse que los cierres de sucursales siguiesen únicamente un criterio económico.

 
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