Iniciadas las obras para dejar de verter aguas fecales al Manzanares en Perales del Río
El Ayuntamiento denegó las medidas cautelares para paralizar las obras como pedían los vecinos
Comienzo de las obras en Perales del Río / Más Madrid Compromiso con Getafe
Getafe
El Ayuntamiento de Getafe ha iniciado las obras de dos estaciones elevadoras de aguas fecales en Perales del Río, tras denegar la medida cautelar de suspensión de los trabajos presentada por vecinos que han llevado a cabo movilizaciones desde 2020 debido a la cercanía a sus viviendas de una de estas instalaciones. Desde el grupo municipal Más Madrid Compromiso con Getafe han señalado que "después de muchos años, han empezado las obras y al fin parece que con estas obras se van a dejar de verter aguas fecales al río Manzanares en Perales del Río".
Más Madrid Compromiso con Getafe mandó analizar la composición de los vertidos para evaluar el daño ecológico causado y "los resultados del análisis demuestran que lo que se está vertiendo directamente al río Manzanares en Getafe, desde hace muchos años, son aguas fecales sin ningún tipo de depuración".
Así, "si se comparan los valores de la carga contaminante de este vertido con la calidad del agua del Río Manzanares a su paso por el barrio de San Fermín en el municipio de Madrid, los resultados son muy preocupantes porque los sólidos en suspensión son tres veces más y hay un alto contenido de contaminación orgánica, tanto de la materia biodegradable como de la que no lo es".
Hace más de un año, la Junta de Gobierno local adjudicó de urgencia las obras por 1,1 millones de euros, ya que las aguas fecales del área de Getafe Este no pueden llegar a la Estación de Aguas Residuales Sur porque las estaciones de bombeo existentes han sido desmanteladas y por lo tanto no pueden conducir el agua hasta el colector previo a la entrada a dicha depuradora.
El plazo de ejecución de las obras fue de ocho meses, pero se tuvo que prorrogar el pasado mes de mayo por otros siete, ya que no están finalizadas. Actualmente, para evitar la acumulación de aguas residuales, existe un aliviadero que las vierte directamente al río Manzanares sin depuración alguna, lo que lleva años originando problemas medioambientales y multas de la Confederación Hidrográfica del Tajo al Ayuntamiento. Este hecho también provocó una denuncia del partido local Impulsa Getafe en los Juzgados de la localidad, por lo que la alcaldesa, Sara Hernández, tuvo que prestar declaración como imputada en julio de 2019.
