Los jóvenes formados se marchan

Valladolid

Beatriz Arcos, de 28 años y Pablo Molina de 29 jamás se hubieran conocido si Ciudad Real y Valladolid les hubieran ofrecido una oportunidad laboral. Ahora viven juntos y comparten un pequeño piso en la capital de España que han convertido en oficina.

Así comienza la historia de estos dos jóvenes,  que son el reflejo de otros muchos y que se marchan de sus lugares de origen para buscar una oportunidad laboral.

Julio López es profesor en la Universidad de Valladolid, trabaja con esos jóvenes a diario y tiene varias publicaciones sobre el éxodo de la juventud y asegura que " una comunidad que no da una oportunidad a sus jóvenes es una comunidad frustrada ". Este  profesor destaca en una entrevista a R. Valladolid de la C-Ser el esfuerzo de esta generación por formase para luego tener que marcharse.