Génova maniobra para que Ayuso no 'se coma' a Casado
Génova intenta neutralizar a la presidenta de la Comunidad para que no concentre todo el poder del partido
Se explora una tercera vía que evite un choque entre Ayuso y Almeida
Madrid
Lunes 30 de agosto. Isabel Díaz Ayuso reúne en La Casita del Canal a todo su gobierno en un encuentro de trabajo para preparar el curso político. La presidenta se centra en la gestión de su ejecutivo y no comenta sus intenciones. La voluntad de Ayuso de optar a la presidencia del PP se aireó y confirmó un día después desde su círculo más próximo. Su consejero portavoz se enteró de las intenciones de Ayuso en los pasillos de la SER y la noticia desató el nerviosismo y la tensión interna de un partido, el PP de Madrid, en manos de una dirección interina desde la salida forzosa de Cristina Cifuentes hace ya más de tres años.
El debate no es casual y Ayuso lo abre intencionadamente en su mejor momento político. Pletórica tras el triunfo electoral de 4-M y con todas las miradas puestas en su figura, la presidenta da un paso que rompe la aparente tranquilidad de una carrera pendiente pero aparcada por Génova, 13, donde algunos sectores próximos a Pablo Casado desconfían de los movimientos en clave nacional que pueda estar pergeñando Miguel Ángel Rodríguez, jefe de gabinete y estratega de cabecera de Isabel Díaz Ayuso.
El temor en el PP es doble. El primero, la inestabilidad que provocan estos procesos en cualquier formación y el segundo, que Ayuso y su equipo, traten de aprovechar el tirón para concentrar todo el poder del PP de Madrid, cerrando el paso a otras sensibilidades. Las intenciones de Ayuso han removido esos temores. La reacción más airosa -y también la menos disimulada- la protagonizó el alcalde José Luis Martínez-Almeida: "El partido está en buenas manos con Ana Camins y Pio García Escudero. Los madrileños no van a entender que estemos más preocupados por el futuro del partido que por el futuro suyo".
Almeida nunca expresó sus deseos de optar por la presidencia del PP de Madrid pero tampoco se había descartado. A Almeida le incomoda esa hipotética batalla. El pasado martes, durante un desayuno informativo, Pablo Casado intentó neutralizar el movimiento de Ayuso pero echó más leña a la caldera al insinuar que en Madrid hay dos personas, Almeida y Ayuso, que tendrán mucho que decir en ese proceso.
Fuentes del PP de Madrid aseguran a Radio Madrid que Ayuso “se precipitó abriendo un melón que no tocaba”. “Va por libre, se ha lanzado y se ha llevado un portazo que no esperaba”.
La tercera vía: evitar la confrontación Ayuso/Almeida
La solución en la que piensa Génova es la de una tercera vía. Es decir, optar por una figura como Ana Camins, actual secretaria general del PP de Madrid, que evitaría una confrontación directa entre la presidenta de la Comunidad y el alcalde de la capital.
La apertura de esa vía -se concrete o no en una candidatura alternativa- sería clave para frenar la temida omnipresencia de Ayuso. Destacadas voces del partido en Madrid aseguran que “durante este año o se arreglan las relaciones entre Ayuso y Almeida y se pacta algo de consenso, o una tercera vía tiene mucha fuerza porque el PP de Madrid no se puede permitir una bronca como las de antaño". Nadie quiere reeditar aquellos históricos enfrentamientos entre Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz Gallardón, que acabaron con el entonces alcalde de la ciudad amagando primero y retirando después una candidatura alternativa con su vicealcalde Manuel Cobo.
Aquella guerra la ganó Esperanza, quien concentró todo el poder del partido y del gobierno hasta que dejó la Puerta del Sol en 2012.
Javier Casal
Presento el informativo Hora 14 en la SER. Durante 11 años estuve al frente de la actualidad de Madrid...