La firma del acuerdo acaba con la huelga en Tubacex casi 8 meses después
En una nota, Tubacex ha precisado que el acuerdo garantiza la competitividad de las plantas alavesas en un momento de mercado debilitado y dominado por "el desafío de la transición energética"
Bilbao
La huelga iniciada hace casi ocho meses en las plantas alavesas de Tubacex de Llodio y Amurrio finaliza mañana a las 6:00 horas, cuando empieza el primer turno en la empresa, tras firmar este lunes la dirección y la mayoría del comité de empresa el acuerdo que han alcanzado para poner fin al conflicto laboral.
Convocados por el Gobierno Vasco, que ha actuado de mediador en el conflicto, representantes de la empresa y de los sindicatos ELA, CCOO y el independiente Atal han firmado el acuerdo a primera hora de esta tarde en la sede del Ejecutivo autónomo en Bilbao, en un acto sin presencia de los medios de comunicación por deseo de la representación sindical.
La viceconsejera de Trabajo y Seguridad Social, Elena Pérez, se ha congratulado de que acaba "un conflicto duro con compromisos que están a medio camino entre los que quería la empresa y defendían los trabajadores".
Para la representante gubernamental, se demuestra que la negociación colectiva "es la mejor vía para la solución de los conflictos".
El acuerdo alcanzado entre comité y dirección deja sin efecto los 129 despidos del ERE que fue anulado por el Tribunal Superior de Justicia y recoge el compromiso de Tubacex de retirar el recurso ante el Tribunal Supremo.
Además de eliminar todos los despidos forzosos, se incluye la garantía de empleo y de inversiones hasta 2024 y la ampliación de la jornada anual en 40 horas.
Tras la firma del acuerdo, llevada a cabo sin que lo vote la totalidad de a plantilla de las plantas de Llodio y Amurrio como había pedido CCOO, las partes han mostrado su satisfacción.
Reacciones tras la firma del acuerdo
En declaraciones a los periodistas, el responsable de las plantas alavesas de Tubacex, Celes Danis, ha valorado que permite retomar reanudar la actividad en la empresa, "ganar la competitividad necesaria" y "posicionar las plantas alavesas de cara al futuro".
Por su parte, el presidente del comité de empresa, Eduardo Ibernia, ha considerado que el acuerdo alcanzado es "un ejemplo de lucha obrera y del recorrido que tienen las huelgas, de cómo se puede echar abajo un recurso en el Tribunal Supremo".
El representante sindical ha explicado que no han querido imágenes de la firma en el Gobierno Vasco al entender que los "protagonistas" son los firmantes del acuerdo. "Que hayan intermediado -desde el Ejecutivo autónomo- en el conflicto está bien, pero no son los máximos exponentes del conflicto", ha sostenido.
Asimismo, ha lamentado que pese a que ha habido con anterioridad "muchas oportunidades" de solucionar este conflicto por parte de la empresa y el Gobierno Vasco, ello "no ha sido posible".
En una nota, Tubacex ha precisado que el acuerdo garantiza la competitividad de las plantas alavesas en un momento de mercado debilitado y dominado por "el desafío de la transición energética".
Entre las medidas pactadas, ha destacado "las bajas voluntarias, prejubilaciones, la reducción de una serie de partidas de gastos de personal, el incremento de la jornada laboral y la congelación salarial hasta 2025".
La empresa, según ha indicado, logra la paz social al haber sido aprobado un convenio hasta diciembre de 2024 y el grupo da por finalizada su reestructuración a nivel global.
La dirección ha afirmado que las medidas no traumáticas pactadas fueron planteadas por la compañía en julio de 2020, pero ante la falta de acuerdo y el "deterioro estructural del mercado", se presentó el ERE de extinción de contratos, que motivó la huelga.
Tubacex ha indicado que con la reactivación de la actividad, la compañía encara los próximos trimestres con "optimismo".
Según ha señalado, ha habido un aumento en la entrada de pedidos que ha permitido "normalizar la actividad productiva en el resto de plantas del grupo, retirando así los ERTEs realizados en los últimos meses, una decisión que se mantiene en las plantas alavesas condicionada a la recuperación de la actividad y el mercado".