Mayores convertidos en actores para los pueblos que no se quieren vaciar

Mayores de la localidad malagueña de Alameda recrean la historia teatralizada de su pueblo a través de códigos QR en un proyecto de la asociación Naim que enseña más de 200 jóvenes de municipios en riesgo de despoblación a formarse y buscar empleo en internet. Estos itinerarios personalizados han ayudado a 29 jóvenes a encontrar un puesto de trabajo. El proyecto, financiado por la Diputación a través de un convenio con la Fundación La Caixa, se ha desarrollado en dos comarcas de Málaga que han perdido el 3,5% de su población en una década Alameda es el corazón de Andalucía. A mitad de camino entre Málaga, Sevilla y Granada, era parada y posta de diligencias, punto neurálgico que no pasó desapercibido para José María El Tempranillo. Allí fue emboscado y allí yacen sus restos. Estas son las historias que cuentan los mayores en Alameda. También, cómo se situaron junto a Aníbal en las luchas entre Roma y Cartago o que todavía es posible pasear por un trozo de la calzada romana, hoy la calle Real. Los vecinos han condensado los grandes momentos históricos del municipio, los han teatralizado y puesto a disposición de los visitantes a través de códigos QR. Esta experiencia que combina tradición, historia y memoria oral forma parte del proyecto Pueblos vivos. Lucha contra el despoblamiento rural, una iniciativa puesta en marcha por la asociación Naim, financiada gracias a un convenio de colaboración entre la Diputación de Málaga y la Fundación La Caixa para promover la innovación social en la provincia. El proyecto busca luchar contra la despoblación en los municipios de menos de 5.000 habitantes dos de las comarcas más golpeadas por la despoblación: Nororma y Antequera que han perdido en la última década el 3,5% de su población. Doce de los 13 pueblos que componen ambas comarcas han habitantes desde 2010, de acuerdo con los datos del Instituto Nacional de Estadística. Para frenar esta tendencia es esencial detener el éxodo juvenil. “Estos municipios comparte una misma realidad. Son pueblos pequeños, con población envejecida y pérdida de residentes jóvenes. Apostar porque encuentren empleo en su lugar de residencia es la mejor forma de luchar contra la despoblación rural”, explica Enrique Porras, presidente de Naim. Así lo ha detallado en la SER en una entrevista que puedes escuchar al completo a continuación. El programa se puso en marcha en septiembre del año pasado, justo cuando la segunda ola de la pandemia empezaba a cobrar fuerza, con especial incidencia en esta zona de la provincia de Málaga. Por eso el trabajo de activación, orientación y acompañamiento laboral se ha diseñado teniendo en cuenta que tanto las búsqueda de empleo, como la formación y el acceso a los servicios públicos se realizan mayoritariamente a distancia y que no todos los jóvenes tienen habilidades suficientes. De hecho, los talleres para formar en competencias digitales básicas han sido una de las piedras angulares del proyecto: se han llevado a cabo talleres para aprender a manejar el certificado digital, registrarse como demandante de empleo, preparar y enviar el currículum online o buscar empleo en las diferentes plataformas de internet. Además de entrenar estas habilidades básicas, se ha pretendido también abrir nuevos canales de actividad económica y laboral, alternativos a la economía tradicional. En este sentido se han impartido talleres de teleformación para docentes, venta online o gestión telemática de alojamientos rurales. El resultado es que desde septiembre hasta ahora 203 jóvenes desempleados han participado en los diferentes talleres y programas. De ellos, 81 han recibido ayuda personalizada de la experta en empleo de Naim con base en Alameda y 21 han encontrado trabajo en las áreas de servicio de ayuda domiciliaria, limpieza, comercio, refuerzo educativo y comedores escolares. Finalmente, el proyecto tampoco ha dejado atrás a los adolescentes, con dos tipos de iniciativas dirigidas a despertar vocaciones tecnológicas. Por un lado se han organizado cinco talleres relacionados con las nuevas tecnologías para 50 alumnos de sexto de primaria del colegio público San Francisco de Asís, en Alameda, y 26 de primero y segundo de la ESO del colegio público Rafael Alberti, de Villanueva de Tapia. En ellos se han familiarizado con campos como la impresión digital. Por otra parte, durante las vacaciones de navidad se llevó a cabo un campamento virtual tecnológico para jóvenes de 9 a 16 años con contenidos sobre impresión digital, la programación con scracht y electrónica con arduino. El proyecto concluye ahora con la presentación pública de los códigos QR que recogen la historia teatralizada del municipio, iniciativa en este caso orientado a la capacitación digital y participación social de los mayores.

Mayores convertidos en actores para los pueblos que no se quieren vaciar

Los vecinos de un pueblo de Málaga narran, de forma teatralizada, la historia de sus municipios para atraer a jóvenes

Jesús Sánchez Orellana