La pobreza y la exclusión social están relacionadas con la aparición de problemas de salud mental en niños
Así lo señala un estudio realizado por el FISABIO , la Universitat de València y la Universitat Jaume I, que asegura que el contexto físico y social, el estrés familiar y el perfil parental también son factores importantes
Valencia
La pobreza y exclusión social ejerce un efecto directo en la aparición de problemas de salud mental en niños de 7 a 11 años. Así lo señala un estudio realizado por el FISABIO, la Universitat de València y la Universitat Jaume I, que asegura que el contexto físico y social, el estrés familiar y el perfil parental también son factores importantes.
Desde el FISABIO, Llúcia González, investigadora del Ciber de Epidemiología y Salud Pública explica que el estudio demuestra que tener un contexto más desaventajado económicamente repercute en los problemas de depresión o ansiedad de niños y niñas. La experta añade que se ha comprobado que el contexto familiar ejerce un papel mediador entre el riesgo de pobreza y exclusión a través del estrés familiar y la percepción de las funciones parentales por parte de los padres y madres.
González insiste en que las administraciones públicas tienen que trabajar en esta dirección y establecer una escuela de parentalidad positiva en todos los colegios de la Comunitat Valenciana en la que los padres y madres puedan contar con la orientación de profesionales en la educación de sus hijos. La experta asegura que su creación ayudaría a los padres a resolver dudas sobre cómo tener afectividad con el hijo, cómo poner castigos proporcionales o cómo regular el uso de la tecnología.
Llúcia González, investigadora del CIBERESP (Ciber de Epidemiología y Salud Pública): "Tener de referencia en cada escuela pública una escuela de parentalidad positiva"
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La investigadora plantea también dos soluciones más desde el ámbito laboral. En este sentido, propone la necesidad de fomentar el acceso al ingreso mínimo vital y mejorar el acompañamiento de los padres y madres que están en situación de desempleo. Añade también la necesidad de evitar el sistema educativo dual que segrega a los que tienen más recursos de los que no los tienen o eliminar la pobreza energética.
Así se ha realizado el estudio sobre salud mental infantil
Para medir estos dos parámetros, el análisis ha contado con el indicador AROPE (At Risk of Poverty or Social Exclusion), utilizado desde 2010 por la Unión Europea. Al relacionar AROPE con la salud mental y el contexto familiar de los niños y niñas objeto de estudio, los resultados mostraron que el riesgo de pobreza y exclusión social se relaciona con más problemas de salud mental tanto de tipo 2 internalizante (como ansiedad, depresión o problemas somáticos) como externalizante (problemas de conducta o agresividad).
La relación entre el nivel de pobreza y exclusión social familiar y los problemas internalizantes y externalizantes se mostró determinada por el nivel de estrés parental. También estaba afectada por el perfil parental, que incluye conceptos como la percepción que tienen las madres y padres de su rol en la crianza de su hijo/a o los conocimientos que tienen sobre el desarrollo evolutivo.