Rubén: "Me he sentido solo. Me he sentido despreciado, cuando lo que necesitaba era una ayuda"

Zamora

Perderlo todo. El medio de vida, la vivienda, las relaciones personales y también familiares, por este o aquel motivo. Acabar en el absoluto desamparo que ofrecen las calles de nuestras ciudades y ser juzgado por esta razón. Sobre esta problemática vuelve a poner el foco Cáritas, en el Día de las Personas sin hogar, en una campaña titulada “¿Sin Salida? Perdidos en un sistema de protección social que no protege”.

Un año más, desde la organización católica quieren llamar la atención de las instituciones y a la ciudadanía las dificultades extremas por la que pasan las aproximadamente 40.000 personas que se encuentran en esta situación, así como los más de dos millones de personas en situación de extrema vulnerabilidad y que exigen respuestas urgentes.

Por esta situación ha pasado Rubén, un joven de 33 años con cuyo testimonio hemos puesto voz a las personas sin hogar en “Hoy por hoy Zamora y Benavente”. Escasez de recursos, que le llevó a terminar en la calle y de esta situación a “otras cosas” que terminaron por complicar su situación. En muchas ocasiones asegura haberse sentido “solo” y “despreciado” en el momento en que más ayuda necesitaba. “Me acuerdo que estaba en Santa Clara, había gente que se acercaba pero había otra que pasaba y te miraba, pero con la intención de alejarse”. Miradas de desprecio tremendamente dolorosas que se suman a la situación de soledad que ha tenido que afrontar por estar en la calle y que conduce a  "un pozo que se hace cada vez más profundo”.

Rubén recuerda un día en la céntrica calle de la capital conoció a un educador de calle gracias al que ha conseguido abandonar la calle y a afrontar el futuro con esperanza y desterrar esos momentos de su vida en la cual “no le encontraba sentido”