El contrato de la ORA se prolonga al no salir a tiempo a concurso

Aranda de Duero

El Ayuntamiento de Aranda decide continuar con la misma empresa que gestiona el servicio de aparcamiento regulado de la zona azul a pesar de que el contrato vencería el 1 de noviembre. Así lo decidía este jueves la Corporación municipal con el fin de darse un margen para sacarlo de nuevo a concurso.

Como ha ocurrido en más de una ocasión con otras contratas, se agotaba el plazo para licitarlo y el equipo de gobierno considera que el servicio no puede quedar en suspenso. La decisión contó con el voto en contra del PSOE, Podemos e Izquierda Unida y las abstenciones de los concejales no adscritos Mar Alcalde y Sergio Ortega, que coinciden en considerar que esta medida obedece a una negligente gestión, por no prever con tiempo suficiente que estos contratos tienen una fecha de caducidad. “Es una ampliación que está cogida con alfileres bajo nuestro punto de vista y, por desgracia, sorpresas de este tipo nos las encontramos cada dos por tres en este Ayuntamiento, no sabemos si, por falta de personal, por falta de interés, pero lo que vemos es que si el 23 de julio empiezan las actuaciones preparatorias de este pliego estaba claro que nos iba a llegar a los plazos”, argumentaba Vanesa González, concejal de IU.

El PSOE ponía en duda incluso la legalidad de este acuerdo, aunque el equipo de gobierno considera que la decisión está respaldada por los informes técnicos. Respecto a la prolongación de este contrato, que no tiene categoría de prórroga, no está determinado en el acuerdo, aunque el concejal de Contratación garantizaba que va a ser limitada. “Quiero dejar claro que no es ninguna prórroga, es una continuidad del servicio y que no va a ser tampoco por un plazo alargado, la normativa dice que una prórroga tiene que ser como máximo de 9 meses y yo estoy seguro de que no vamos a llegar ni a un tercio, esa es la intención y se está trabajando para ello”, aseguraba Francisco Martín Hontoria.

En virtud a una moción presentada con carácter de urgencia en la última parte del pleno por el propio equipo de gobierno, se incorporó un anexo para que durante el tiempo que dure este epílogo la empresa adjudicataria no cobre la parte correspondiente a la amortización de los equipos que se acordó en su día en el contrato, por entender que ya están suficientemente amortizados.

En esta sesión plenaria, con igual resultado en la votación, se acordó la aprobación definitiva a la Ordenanza reguladora del procedimiento para el aplazamiento y fraccionamiento de deudas tributarias y otros ingresos de derecho público, desestimando una alegación del PSOE en contra de que el pago a plazos de los impuestos no se pueda aplicar a los que tengan un importe inferior a 200 euros. La concejal de Hacienda explicó que esta medida tiene un coste administrativo que no compensa en importes menores. Los grupos de la oposición coincidieron en criticar que esta medida es impopular y no tiene en cuenta las necesidades de los menos pudientes. “Sabemos que hay viviendas que pagan menos de 200 euros de IBI y nos preguntamos por qué privamos a toda esa gente de poder fraccionar éste y otros impuestos, porque como ustedes han dicho en alguna comisión, son pocos estos recibos de menos de 200 euros y no se les da la oportunidad de fraccionarlos a todos sin discriminar ninguno: seguimos en la misma sintonía de siempre de no ayudar al que más lo necesita”, criticaba Laura Jorge, concejal socialista.

Tampoco hubo consenso a la hora de aprobar una modificación de crédito de 839.000 euros para hacer frente a determinados gastos que no pueden esperar y que está dividida en cinco partidas. La más cuantiosa son 334. 000 euros para liquidar la minuta de la defensa jurídica del pleito de la depuradora. Varios concejales de la oposición coincidieron en considerar exagerada esta tarifa, aunque el equipo de gobierno justificó este gasto recordando que lo que estaba en juego es una demanda que pedía 19 millones de euros al Ayuntamiento. El acuerdo se aprobó con los votos favorables del PP, Ciudadanos, Vox y Vicente Holgueras y la abstención del resto.

Vox logró luz verde para su moción que plantea la predisposición del Ayuntamiento arandino a colaborar con Tubilla del Lago para facilitarle el eficiente funcionamiento del suministro de agua potable y poner el nombre de esta localidad a una calle de Aranda como agradecimiento a la cesión de las aguas de sus manantiales que se acordó hace casi un siglo.

La propuesta contó con el rechazo del PSOE y las abstenciones de Podemos, IU y los ex concejales socialistas no adscritos. De estos últimos fue Sergio Ortega el que se mostró más crítico con esta medida por entender que no tiene mucho fundamento. “Efectivamente se puede poner una calle de Tubilla del Lago, como se puede poner una calle de Fuentespina, de Guma o de Villanueva de Gumiel y de todos los pueblos de la Ribera, pero el resto son cosas de la Diputación que con 115.000.000 de euros que tiene actualmente, aparte de hacer la vuelta ciclista y otras cosas, pues bien valdrían para ayudar a todos los pueblos de la comarca”, sentenciaba el edil.