Largo fin de semana de Halloween con especial atención a los botellones

Valencia

Ante nosotros tres noches de Halloween, las de este largo fin de semana, en las que niños y no tan niños preparan sus disfraces para celebrar esta fiesta anglosajona, que en realidad es una festividad ancestral irlandesa con la que comenzó a festejarse el final del verano. Originalmente, los ancestros paganos consideraban que durante la noche del 31 de octubre los espíritus de los muertos volvían a visitar el mundo de los mortales.

En 'Hoy por Hoy Locos por Valencia' nos hemos acercado a una de las muchas tiendas de disfraces que hay en València, Party Fiesta. Una de sus dependientas, Gaby, nos confirma que este año hay una avalancha de personas buscando el disfraz de la serie televisiva “El juego del calamar”. Y como quiera que todavía no es un disfraz que se ha fabricado, como segunda opción suelen llevarse el de “La casa de papel”, que es muy parecido y con algunos complementos da el ‘pego’.

También hay grupos que eligen el mismo disfraz para todos sus miembros, aunque no es lo normal. Y aunque los más avispados empezaron a comprarlos en septiembre, es ahora en los últimos días, cuando se realizan las ventas masivas. El precio medio de un disfraz es de unos 20 ó 25 euros, si bien los más elaborados pueden llegar a los 50, a los que habría que sumar 15 euros más en complementos.

Eso sí, este año se nota más alegría que en 2020, cuando todavía estaban en vigor algunas restricciones por la pandemia.

Seguridad

Durante las próximas noches, tal y como nos cuenta Aarón Cano, concejal de Protección Ciudadana del Ayuntamiento de València, se ha preparado un dispositivo de 200 agentes que, junto con los efectivos de la Policía Nacional y Policía Autonómica, se encargarán de velar por un Halloween seguro. Las zonas que merecerán especial atención para evitar grandes concentraciones y botellones, serán plaza de Honduras, plaza del Cedro, Benimaclet y también la Virgen, que se acotará con vallas como en años anteriores.

El año pasado, la Policía de la Generalitat tuvo que cerrar dos fiestas ilegales y disolver otras cinco fiestas con la Policía Nacional. Se levantaron 31 actas por no respetar las medidas anticovid y se controlaron 90 establecimientos.

En la ciudad de València, la Policía Local detuvo a cuatro personas por delitos contra la seguridad ciudadana y disolvió 17 grupos que superaban las seis personas, además de imponer 89 denuncias por infringir el confinamiento nocturno que entonces empezaba a medianoche.