Desaladoras frágiles, agricultores desesperados y el anillo hídrico que nunca llega
Los agricultores de la zona que ha quedado incomunicada por el volcán de La Palma están regando en precario algunas de las fincas con una mezcla de agua desalada y agua privada
La gestión del agua en La Palma, -en manos privadas-, es un asunto complejo y muy controvertido. Los agricultores demandan desde hace tiempo sin éxito la instalación de un túnel de trasvase para acarrear agua al Valle y ahora apuestan por el anillo insular. Una de las dos desaladoras instaladas para regar la zona incomunicada no funciona, pendiente de ajustes en la bomba. Las averías son frecuentes y se están arreglando día a día. Es una instalación precaria y provisional que se ha hecho en dos semanas gracias a los esfuerzos de la Consejería de Transición Ecológica, pero requiere seis meses para su adecuada instalación. No tienen otra forma de evacuar el barro que echarlo a las calles de la zona de exclusión para no convertir las fincas en barrizales.
Además, al tratarse de una obra de emergencia las desaladoras no cuentan con una evaluación de impacto ambiental, sus tubos cruzan la playa y la salmuera se vierte al mar. La intención de Transición Ecológica es evaluar su impacto ahora y entre otras cosas, construir un pozo para depositar la salmuera. Pero la prioridad es mantener vivas unas plantas que en muchos casos, están muy dañadas y su viabilidad es dudosa. Las desaladoras hasta ahora han costado cuatro millones de euros.
Fuentes consultadas por la SER confirman que la cantidad de agua que producen es insuficiente para las necesidades totales de riego, -aunque no se han hecho públicos datos oficiales acerca de cuántas fincas están pudiendo regar-. Por eso y para mejorar su calidad, el agua desalada se mezcla con agua acarreada en un barco cisterna. Tampoco hay datos sobre el precio del agua que contiene ese barco. Mantenerlo a flote cuesta 14.000 euros al día, pero no ha trascendido qué conceptos incluye ese precio.
Mientras tanto, la opción viable para la subsistencia del sector es el subsidio temporal a través de mecanismos públicos a las familias que dependen directamente de esto, como ya está haciendo el Ministerio de Empleo con los trabajadores y trabajadoras de los empaquetados de plátanos a través de los ERTES. “No sabemos ni por dónde empezar, esto está perdido”, explica uno de los agricultores que tiene su finca en la zona de La Bombilla. “Esto es un camarote de ceniza, no vale la pena sino replantar”, añade.
Existe una alternativa a las desaladoras y el barco cisterna: el cierre del anillo hídrico. El Consejo Insular de Aguas tiene la solución sobre la mesa desde antes de la erupción
El Cabildo de La Palma, el Consejo Insular de Aguas, los agricultores y hasta las Haciendas se muestran a favor de la alternativa: el cierre del anillo insular desde Fuencaliente hasta Puerto Naos, pero no hay información acerca de sus avances. Un grupo de ingenieros presentaron cuatro alternativas para la prolongación del canal LP-1 hasta la balsa de cuatro caminos, sin embargo, no se ha comunicado ningún avance sobre este proyecto desde entonces
Rafael Lorenzo es uno de los ingenieros de Awara, la empresa que realizó el estudio encargado por el propio Consejo Insular. "Contando con recursos 'ilimitados' se pueden poner varias contratas trabajando a la vez en puntos distintos, modificando también un poco el proyecto y siendo más o menos realista, entre tres y seis meses podría estar funcionando", explica Rafael Lorenzo. “Si hubiese estado desarrollado el cien por cien del riego de la zona estaría cubierto”, añade.
Las seiscientas hectáreas de cultivo podrían regarse elevando el agua desde el canal LP-1 en Fuencaliente hasta el pueblo de Los Canarios y desde allí, llevarlo al Valle a través de una tubería en la carretera. “Además, podríamos sacar tomas de esa tubería y combatir los incendios, mejorar la red de Fuencaliente y aprovechar su bajada para generar casi un tercio de la energía que se necesita para su elevación”, explica Lorenzo.
Javi Rodríguez
(La Palma, 1991) Periodista vinculado a la Cadena SER en Canarias desde el año 2009, apasionado de los...