El Ayuntamiento de València se hace con 130 documentos que muestran el lado más humano de Blasco Ibáñez
Se trata de una colección muy heterogénea que cuenta con documentos tan curiosos como cartas a su segunda esposa, cartas de sus fans desde Tokyo, manuscritos, pruebas médicas del escritor y recibos del taller de su cadillac
El Museo de Blasco Ibáñez cuenta con nueva documentación
Valencia
La Casa-Museo Blasco Ibáñez ha incorporado 132 documentos, pertenecientes al coleccionista Noguera. Dichos documentos fueron adquiridos el pasado 26 de mayo en una subasta celebrada en Madrid por su precio salida 20.000 euros. La nueva obtención contiene cartas a su segunda esposa, cartas de sus fans desde Tokio, manuscritos, pruebas médicas del escritor y recibos del taller de su Cadillac, entre otras cosas.
Dentro de todos ellos se encuentran cuatro cartas del autor enviadas a su segunda esposa Elena Ortúzar. La más ilustradora es una que Blasco Ibáñez escribe desde Canadá. En ella muestra su lado más humano al desahogarse con su esposa sobre la muerte de su hijo Julio César. El autor le confiesa estar muy apenado por no poder asistir a su entierro.
Por otro lado, la colección incluye un documento que abre nuevas líneas de investigación del escritor: un testimonio notarial de Luis Elguín, primer esposo de la segunda mujer de Blasco Ibáñez, Elena Ortúzar. En él, Luis Elguín le confiere un poder económico a Blasco Ibáñez.
El director del museo apunta a que el motivo de este escrito puede encontrarse en la fallida experiencia agrícola colonizadora de Blasco Ibáñez, un proyecto por el que el escritor tuvo que pedir préstamos y que le supuso muchos quebraderos de cabeza por las deudas que levantó.
También entre los 130 documentos hay algunas pruebas médicas del escritor y varios informes de diferentes oftalmólogos. Esto puede apuntar a que Blasco Ibáñez no se fiaba mucho de los médicos y buscaba varias opiniones. El escritor padecía diabetes, una enfermedad que afectó a su capacidad visual, motivo por el cual tuvo que ser intervenido en varias ocasiones. Por ello, el escritor recurrió a diferentes secretarios a los que les dictaba sus escritos.
Los documentos adquiridos por el Ayuntamiento de València permanecerán en el museo para que sirvan a los investigadores a la hora de indagar sobre la figura de Blasco Ibáñez, según señala Gloria Tello, concejala de Patrimonio. Tello adelanta que, por ahora, no está previsto exponer la documentación pero esa será una decisión del director del museo.
