Ana Botella, sobre la venta de viviendas a Fidere: "Se respetaron los derechos de los inquilinos"

Madrid

"Se respetaron los derechos de los inquilinos". Así ha justificado la exalcaldesa de Madrid, Ana Botella, la venta de 1.860 viviendas protegidas de la Empresa Municipal de Vivienda al fondo de inversión Fidere. La que fuera edil de la capital ha asegurado que el panorama económico era desoladora desde el 2008 y que el Consistorio se vio obligado a vender los inmuebles ante la delicada situación de la empresa pública. 

Botella, que ha sido increpada por los afectados a la entrada y salida de la Audiencia Provincial de Madrid, se ha mostrado desafiante, aunque segura en sus declaraciones. La exalcaldesa ha defendido la legalidad de la operación y ha justificado la venta como una forma de "cumplir" con los objetivos de déficit marcados desde Bruselas para España. 

La que fuera máxima responsable del Ayuntamiento de la capital ha insistido en que, desde el Consistorio, se cumplió con la ley al vender esas propiedades al fondo Fidere con un objetivo: el fin social de este tipo de viviendas. 

Botella ha incidido en que la venta de las viviendas de protección oficial respondía en todo momento a las necesidades económicas del Consistorio, provocadas por la crisis. De hecho, la exalcaldesa ha asegurado ante la Audiencia Provincial que el Ayuntamiento perdió cerca de 1.300 millones de euros por la crisis.