Así será el nuevo parque de Benicalap

Valencia

El Ayuntamiento de València ha presentado esta mañana el proyecto de ampliación del Parque de Benicalap que pretende generar una gran zona verde que una este barrio y Ciutat Fallera y sirva también de barrera acústica y visual de la Ronda Norte. Se trata de un proyecto a medio plazo que se quiere desarrollar en tres fases y que supondría una inversión de algo más de 9 millones de euros.

Hay que recordar que el de Benicalap fue el primer gran parque que se construyó en la València democrática, en la época del alcalde Ricardo Pérez Casado, pero desde entonces está pendiente de ejecutar su ampliación.

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El ámbito de actuación abarca una serie amplia de campos, solares y edificios, en parte municipales, en parte privados y algunos ya en proceso de expropiación, limitados por el Parque de Benicalap, la avenida de Burjassot, y las calles de Alquería els Moros, Emili Camps, Parot, Tabal i Dolçaina, Foc y la Ronda Norte.

El objetivo de este proyecto es programar el desarrollo de los casi 70.000 metros cuadrados que quedan por ejecutar en el Parque de Benicalap, a realizar por fases teniendo en cuenta los diferentes proyectos de expropiación necesarios y la integración de las alquerías y construcciones de valor patrimonial existentes y sus espacios libres o jardines vinculados en su entorno.

Y es que en ese espacio está el Casino Americano, cuyo proyecto de rehabilitación está en fase de desarrollo, así como su declaración como Bien de Relevancia Local (BRL), la Alquería La Torre y su jardín (BRL, en fase de desarrollo el proyecto de rehabilitación), la Alquería dels Moros y su entorno, declarado Bien de Interés Cultural (BIC) o el jardín experimental Grow Green Bosquete Sostenible, que ya está ejecutado.

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A ello se unen caminos rurales, fragmentos de infraestructura rural usados como zonas de paso y restos arqueológicos como el Molí de Pallús, cuyos restos arqueológicos tienen un importante valor patrimonial, las barracas de Gall y Maño o partidores de acequias como el Braç de Ferrando y de Barraques, que pueden ser unos elementos expositivos de gran potencia y que son parte del ambiente físico de la huerta en los inicios del siglo XX.

Se creará un eje estructurante norte-sur coincidente con un camino rural existente de acceso a las parcelas en uso, junto al antiguo camino de Poblenou que discurre entre las edificaciones de la Alquería dels Moros, además de la antigua carretera de la Alquería del Moros, un vial relativamente moderno que unía el Camí Vell de Burjassot con la actual Avenida de Burjassot.

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La primera fase pondrá en valor el patrimonio histórico de Benicalap, con la renaturalización del entorno de las alquerías del Moro, de la Torre y el Chalet del Americano, cuyas rehabilitaciones están en marcha o a punto de comenzar. La fase dos será una gran zona de huerta, como la de Burriel, con caminos históricos que se rehabilitarán y en la tercera, la más alejada del actual parque, se generarán espacios deportivos, culturales, zonas infantiles.

El objetivo es desarrollar el proyecto durante lo que queda de esta legislatura y la próxima, como adelantaba la vicealcaldesa Sandra Gómez.

Esta ampliación mejora la integración del barrio en su entorno, facilitando la accesibilidad general del barrio con la ciudad, incidiendo en una movilidad sostenible, a través de recorridos de conexión con el parque y con la ciudad. Además, aporta un diseño seguro bajo los criterios de perspectiva de género en espacios abiertos y en zonas de juego o deportivas, que fomentarán la integración social.

Por último, pone en valor el espacio público y la naturalización del barrio generando ejes verdes y espacios arbolados en la estructura urbana que conectan con el Parque de Benicalap, la huerta norte, la zona residencial y los talleres de Ciutat Fallera, integrándose todo en la infraestructura verde.