La dislexia y la discalculia no solo generan problemas en el aprendizaje, condicionan la vida de las personas

Valladolid

La dislexia y la discalculia son dos dificultades del aprendizaje que afectan al 10% de la población en edad escolar y es algo con lo que conviven el resto de su vida.

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La discalculia se manifiesta con problemas en la lectura, la escritura y la ortografía. Por su parte, la discalculia condiciona el aprendizaje de las matemáticas, el cálculo y otras actividades que tengan que ver con números.

A Paloma San Pedro le detectaron dislexia con cinco años. También tiene discalculia. En A vivir que son dos días Castilla y León nos ha explicado cómo es su día a día: "Te afecta también a la parte emocional. Sientes que te cuesta más que a los demás, te sientes diferente".

La detección temprana es fundamental

Se sigue investigando para conseguir entender mejor la dislexia, pero ni la comunidad científica se pone de acuerdo. Nos lo ha explicado Dolores Armas, licenciada en Psicopedagogía por la Universidad de Salamanca. Nos ha explicado en detalle qué es la dislexia y cómo se trabaja actualmente para conseguir una detección temprana.

La discalculia es la gran desconocida

Si poco se sabe actualmente de la dislexia, menos todavía de la discalculia. "Es mucho más invisible y es más difícil de detectar", nos ha explicado José María Marbán, Doctor en Ciencias Matemáticas por la Universidad de Valladolid y profesor de didáctica de las matemáticas. Hemos hablado con él sobre los rasgos de una persona con discalculia, cómo se intenta convivir con ella y qué se puede hacer para mejorar la vida de estas personas que la padecen.

Las familias reclaman ayuda

Tanto quienes tienen dislexia y discalculia como sus familias sienten cierto desamparo a la hora de afrontar su problema de aprendizaje. Aseguran que las aulas están todavía poco preparadas para la detección precoz de estos problemas y se necesitan más recursos, además de una mayor comprensión por parte de la sociedad para entender lo que les pasa y no contribuir en el daño emocional que sufren estas personas.