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Cádiz

Dura derrota del Cádiz CF, goleada incluida que vuelve sembrar más dudas. Los amarillos llegaban a su cita contra el Atlético de Madrid después de recibir cuatro goles ante Getafe haciendo un partido impropio de un equipo de primera división. Conscientes de la difícil cita ante el cuadro colchonero lo primero era mejorar la imagen para volver a coger sensaciones y recuperar confianza. Y así fue durante buena parte del partido.

El cuadro de Álvaro Cervera comenzó bien el partido. Serio e intenso, teniendo criterio cuando poseía el balón. Así fue la primera parte, con dominio alterno, sin goles pero con la sensación de un equipo que estaba recobrando un buen nivel y que incluso llegó a mandar, por momentos, en el partido. Hubo pocas ocasiones, más allá de un disparo de Salvi que tapa Savic tras un error defensivo visitante y otra clarísima que manda fuera Luis Suárez estando solo ante Ledesma.

El partido se iba al descanso y los amarillos iban con buena cara a la caseta. Se había cumplido la primera premisa del encuentro: volver a recuperar sensaciones. Eso durante los primeros 45 minutos, porque luego todo se difuminó.

Es cierto que el Cádiz no entró mal en el inicio de la segunda parte , pero poco a poco se fue descomponiendo. Primero por el empuje visitante y luego por las dudas que acechan a un equipo que no es regular. LLegó el gol de Lemar en el minuto 56, de cabeza, otra vez. En ese punto el Cádiz había recibido 4 goles de 5 en los últimos dos partidos en balones aéreos.

A raíz de ahí el Cádiz comenzó a diluirse, preso de los nervios perdió la intensidad y se quedó en tierra de nadie. Los jugadores perdidos acusaron el golpe y el banquillo inmóvil no ofrecía alternativas para intentar dar un golpe de timón o al menos mantenerse en el partido con un resultado corto. Luego Ledesma volvió a salvar a los suyos. A raíz de ahí los visitantes jugaron a placer.  Griezmann y Correa hacían los dos goles siguientes en jugadas similares con una defensa que volvía a perseguir sombras. Lozano hacía el tanto del honor en una carambola. Pero en la jugada siguiente Cunha ponía el cuarto gol definitivo. Un desastre. El dúo Haroyan Cala ha encajado 8 goles en tres partidos, Athletic, Getafe, y Atlético.