Málaga empieza a suministar agua a la Axarquía ante la severa sequía
El pantano de La Viñuela se encuentra al 17% de sus posibilidades y sin visos de nuevas precipitaciones en la provincia
Situación del embalse de la Viñuela (en Málaga) en estos días / Cadena SER
Málaga
Málaga capital ha empezado a suministrar agua a la comarca de la Axarquía ante la severa sequía que afecta a esta zona de la provincia. Desde este lunes, desde la ciudad se están aportando cien litros por segundo de líquido desde el pantano del Limonero hasta el de la Viñuela.
Este primer aporte, que sumará tres hectómetros cúbicos al año, empezará a llegar a Rincón de la Victoria según han confirmado a la SER fuentes de la Mancomunidad de Municipios de la Axarquía.
La comarca consume, de media, al año unos trece hectómetros cúbicos de agua. Desde el río Chillar se aportarán otros tres hectómetros adicionales. Por tanto, entre el río y el suministro procedente de Málaga capital, la Axarquía recibirá la mitad de su consumo anual.
El pantano de La Viñuela, el de mayor capacidad de la provincia, se encuentra este martes a poco más del 17% de su capacidad total de almacenamiento. De momento, no están previstas nuevas precipitaciones en la provincia durante las próximas semanas. El sector agrario de la zona, y especialmente los regantes, han mostrado su preocupación por la falta de suministro de agua que se puede producir ante la situación de bajas reservas.
La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha informado al Consejo de Gobierno de que actuará de emergencia en el acondicionamiento y mejora de la estación de impulsión 'Bombeo de La Rosaleda' (Málaga) y en la reconstrucción de la Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR) de La Antilla en Lepe (Huelva), dañada por las lluvias torrenciales de septiembre de 2021.
En total, la Junta destina más de 910.000 euros a la ejecución de estas dos obras hidráulicas declaradas de Interés de la Comunidad Autónoma.
Las actuaciones programadas en la estación de impulsión 'Bombeo de La Rosaleda' del embalse de la Viñuela buscan aumentar la capacidad de transferencia de recursos hídricos entre el Sistema Guadalhorce-Limonero y esta presa de la Axarquía malagueña.
La Viñuela surte de agua a la zona con regulación superficial del mismo nombre, formada por Almáchar, Benamargosa, El Borge, Comares, Cútar, Iznate, Macharaviaya, Moclinejo, Rincón de la Victoria, Vélez-Málaga, Totalán, Algarrobo, Torroz y Nerja; y a la zona regable del Guaro, incluidas en la demarcación hidrológica de las Cuencas Mediterráneas Andaluzas.
Actualmente, La Viñuela se encuentra en situación de "excepcional sequía", por lo que la Junta está impulsando esta obra, la cuarta, incluida entre las medidas del Decreto de sequía para la gestión de los recursos hídricos de las demarcaciones intracomunitarias andaluzas.
Con una inversión de 598.850 euros y un plazo de ejecución previsto de seis meses, las obras en La Rosaleda permitirán que el agua discurra tanto en el sentido actual (Axarquía-Estación de Tratamiento de Agua Potable Atabal) como inverso (ETAP Atabal-Axarquía).
Para ello, es preciso incorporar conducciones y válvulas que permitan el funcionamiento en ambos sentidos manteniendo la disposición actual de las bombas. El período invernal es el idóneo para la realización de estos trabajos, porque durante estos meses disminuye notablemente la demanda de agua para abastecimiento.
Por otro lado, la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible actuará también de emergencia para restaurar la EDAR de La Antilla y que, gracias a la operatividad total de estas instalaciones, esté garantizada la correcta depuración de las aguas residuales de esta aglomeración urbana y de las localidades aledañas.
En este caso, la Junta invierte 312.480 euros en esta depuradora onubense que se vio afectada por un fuerte temporal con lluvias de más de 146 litros por metro cuadrado cuando estaba concluyendo la fase de puesta en marcha para poder entregarse, de forma inmediata, a la entidad explotadora.
En concreto, los fondos se destinan a reparar daños registrados en las propias instalaciones (desperfectos en aliviaderos de pluviales externos o roturas de tuberías, entre otros) y en los equipos que albergan (averías en bombas de recirculación o filtros de partículas, por ejemplo).
La Junta de Andalucía apuesta por una política de agua que, ligada a otras medidas enmarcadas en la Revolución Verde, tiene como principal objetivo proteger y mejorar el medio ambiente, al tiempo que impulsa la recuperación económica de la región mediante una importante inversión pública que contribuye a generar empleo verde.
Por último, han recordado que en lo que va de legislatura, la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha puesto en marcha los 300 proyectos declarados de Interés de la Comunidad Autónoma en 2010 y, de los 1.500 millones de euros que está movilizando el Ejecutivo autonómico en política de aguas, más de 600 millones se refieren a licitación de actuaciones de depuración y saneamiento en los dos últimos años.
