Empleados de la incineradora de Zubieta suspenden su huelga ante "abusos"
ELA va a demandar ante Inspección de Trabajo y juzgados las ilegalidades cometidas por los "abusivos servicios mínimos" y la "sustitución" de operarios que ha llevado a los trabajadores a suspender la huelga
Huelguistas de Ekobal, subcontrata que gestiona la incineradora de Zubieta y que han decidido suspender la huelga / ELA
San Sebastián
Los trabajadores de la incineradora de Zubieta en huelga indefinida desde el pasado 23 de noviembre en demanda de mejoras laborales, han anunciado este viernes que se ven "obligados" a suspender el paro por "los abusivos servicios mínimos" y "la sustitución" de operarios que la secundaban.
El sindicato ELA ha informado en un comunicado de que ha tomado esa decisión y también acudir a la Inspección de Trabajo y al juzgado para "demandar las ilegalidades" que, a su juicio, ha cometido la empresa Ekobal, subcontrata que gestiona la incineradora de residuos de Gipuzkoa, ubicada en los altos de Zubieta de San Sebastián.
La suspensión de la movilización se produce pese a que "las razones que motivaron la huelga continúan", ha subrayado ELA, que recuerda que el paro fue convocado porque la planta de incineración de residuos urbanos "está nefastamente gestionada" y la empresa que la explota "no respeta la legislación laboral".
La central vasca ha añadido que "continuará trabajando" hasta dignificar las condiciones laborales" de los empleados de la infraestructura y "garantizar el respeto a la salud laboral de la plantilla y la medioambiental de la sociedad en general".
El responsable de la Federación de Industria de ELA Oskar Moro ha precisado que los empleados que habían sido convocados a la huelga son algo más de medio centenar, pertenecen a la subcontrata Ekobal y desempeñan su trabajo en las plantas de valorización energética o incineradora y la de tratamiento mecánico biológico (TMB).
El primer día de paro, el 23 de noviembre, el Consorcio de Residuos de Gipuzkoa (GHK) aseguró que sólo un 10 % de la plantilla de la empresa que gestiona esas plantas había secundado la huelga y que, por tanto, funcionaban "con normalidad".
