"En el pueblo el tiempo se vive de otra manera, el trabajo cunde mucho más"

Tarazona

¿Sabían ustedes la palabra cultura significa etimológicamente cultivo? Viene de la palabra latina 'cultus' que significa cuidado del campo. Tiene por tanto un origen muy rural, aunque durante muchos años la cultura parecía más relacionada con los ambientes urbanos, creando además numerosos prejuicios sobre el nivel cultural de los habitantes de los entornos rurales. Es nuestra primera parada en un nuevo capítulo de "En femenino puede SER", en la Cadena SER Tarazona. 

Poesía en la montaña

El Moncayo ha estado muy relacionado siempre con la cultura, especialmente con la literatura. En Litago, de unos 180 habitantes, encontramos uno de los focos literarios y poéticos del Moncayo, la editorial Olifante, una empresa cultural referente en la producción bibliográfica de Aragón dirigida por una mujer, Trinidad Ruiz Marcellán.

“La editorial nació en Zaragoza, pero hace 30 años decidí, con mi pareja Marcelo, trasladarnos al Moncayo”. Ahora ya sola, asegura que en este tiempo “ha sido muy fácil trabajar aquí, el tiempo se vive de otra manera, el trabajo cunde mucho más”.

Su producción es de lo más prolífica. “comenzamos con unas Cartas de Luis Cernuda en 1979 y, a partir de ahí, nos hemos dedicado a publicar a autores aragoneses, españoles y extranjeros”.

La editorial se ha involucrado mucho con la tierra. “Nuestra responsabilidad es que esta tierra del Moncayo tenga estas posibilidades y todos tengamos la oportunidad de disfrutar de la cultura”. Y por ello han trabajado y “hemos sido dinamizadores de la cultura, creamos la Casa del Poeta en Trasmoz, los Festivales de Poesía Moncayo, se ha organizado la ‘Ruta Bécquer’, el Premio de Poesía de Miedo o los encuentros con poetas del programa ‘Moncayo poético’”, relata, entre otros, Trini.

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Para ella el secreto está en dar a conocer que la cultura no es algo exclusivo del medio urbano. “Lo pequeño es lo universal, allí donde estemos realizando algo, en el lugar más pequeño de la tierra, debe ser tan trascendente como si lo hiciésemos en la ciudad más grande el planeta”.

En una tierra tan literaria como el Moncayo, la editora señala que estos pueblos “tienen residuos literarios de cantidad de poetas y escritores. Todas estas voces quedan impregnadas en esta montaña que, ya de por sí, era mágica”

Emprendimiento rural en cifras

Naciones Unidas proclamó el 19 de noviembre como el Día Internacional de la Mujer Emprendedora, con la intención de promover una sociedad más igualitaria que haga posible que la mujer pueda emprender sin que esta actividad suponga un coste para su vida personal y familiar.

Este año, desde la Confederación de Asociaciones de familias y mujeres rurales, Afammer, levantan la voz al observar como la fuerza emprendedora de las mujeres se está apagando. Las causas están en las graves consecuencias económicas y sociales que aún seguimos sufriendo por la pandemia.

Según esta misma publicación, antes de la llegada del Covid, emprendían 9 mujeres por cada 10 hombres. Ellas han liderado la creación de empleo en la última década, pues según datos de la (ATA), del año 2010 al 2020 se afiliaron al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos un total de 120.616 afiliadas frente a los 48.446 varones. Por otra parte, en las zonas rurales observábamos como ellas creaban el 54% del empleo autónomo.

En el medio rural sus iniciativas son fundamentales. 8 de cada 10 autónomas rurales deciden emprender en productos o servicios carentes en su entorno, por lo que planes de ayuda para este colectivo se tornan fundamentales para el desarrollo de los pueblos.

Mujer rural y asociacionismo

En muchos pueblos del Moncayo las asociaciones de mujeres suponen un punto de encuentro y un motor de dinamización cultural, social y hasta asistencial. En este programa nos hemos desplazado hasta Novallas para conocer de cerca una de ellas, la Asociación La Pañuela.

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Agrupa a unas 80 mujeres en un municipio de cerca de 1.000 habitantes. Se fundó en el año 2000 “para socializar, para que las mujeres tuviésemos en un sitio dónde encontrarnos”, explica su presidenta Begoña Ucar. “Sobre todo las mujeres más mayores no salían de casa y pensamos en ofrecer un incentivo para salir más”.

A través de La Pañuela se han organizado viajes, charlas, talleres, actividades de ocio o iniciativas a beneficio de la AECC. “En los sitios más grandes tienes más alternativas, pero en los pueblos lo tenemos que organizar las asociaciones.En Novallas hay muchas y nos permite hacer otras cosas”

“Las cosas están cambiando, antes no veías a las mujeres en un bar, ahora los tiempos han cambiado y es muy habitual verlas tomando un café o socializando en la calle”. Son conscientes de que la mujer rural es fundamental en la vida de los municipios y “hacemos muchas más actividades, nos movemos más”.

Las ‘Dolorosas’: 650 cofrades, todas ellas, mujeres

Pero si hay una asociación de mujeres multitudinaria en la comarca esa es la Cofradía de Nuestra Señora de la Virgen de los Dolores de Tarazona, que ha llegado a contar con cerca de 800 cofrades, todas ellas mujeres.

Se fundó en 1955 por parte del entonces obispo de Tarazona, Manuel Hurtado. “Al ser dedicada a la Virgen pensaron que era el momento de hacer una cofradía solamente de mujeres. Era un mundo de hombres, en el resto de las cofradías no era normal que participaran las mujeres”, explica Inma Soria, la presidenta

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‘Las Dolorosas’ son las custodias de la bella imagen de la Virgen de los Dolores. Hoy en día siguen siendo la mayor cofradía de la ciudad y está asegurado su relevo, porque “se va tomando el testigo de madres a hijas y nietas”.

Su principal papel se centra en los actos previos y de la propia Semana Santa. Pero tiene también otra dimensión mucho más social, ya que “las cofradías nacimos para ayudarnos, para volcarnos en los que lo necesitaban”. Durante la pandemia, se decidió redirigir el dinero que estaba destinado a rehabilitar la peana de la Virgen para ayudar a las familias más necesitadas de la ciudad.

Además, han recolectado fondos para la Isla de la Palma y tienen previstas más acciones humanitarias. "Se quita el dinero de donde sea, la Virgen entenderá que tiene que salir con menos flores; lo primero es lo primero”, concluye Soria.

‘Mujer Rural Avanza’, formando en los pueblos

En nuestro espacio de noticias y convocatorias, nos hemos hecho eco de un proyecto que lleva a cabo la Fundación Cepaim, dedicada a promover una sociedad intercultural e igualitaria en todo el territorio nacional.

El proyecto lleva por nombre Mujer Rural Avanza, una iniciativa dentro del área de Desarrollo Rural y financiada por el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social vía aportaciones IRPF.

A través de él, mujeres que viven en el medio rural adquieren y desarrollan conocimientos y habilidades que favorecen su empoderamiento y empleabilidad. Soria y Teruel son dos de las provincias en las que se ha implantado por el momento.

“Está orientado a mujeres rurales para mejorar su formación y su inserción en el ámbito laboral, consiste en talleres formativas orientados a la inserción laboral, ya sea por cuenta ajena o por cuenta propia”, informa Carla Heras, trabajadora de Cepaim.

Llevan varios años con el proyecto en marcha y aseguran que, de momento, los resultados están siendo muy positivos. No obstante, desde Cepaim reconocen las dificultades a las que se enfrentan las mujeres rurales a la hora de desarrollarse laboralmente.

“Es difícil, no solo vivir en el medio rural, el hecho de ser mujer también es algo que condiciona mucho, pero se intenta buscar la manera de que las mujeres que quieran vivir en un entorno rural puedan hacerlo”.