David Gallego afirma que su relación con Javi Rico sigue siendo "excelente"

Gijón

David Gallego aparenta estar tranquilo a las puertas de jugarse su futuro como entrenador del Sporting en el partido frente el Huesca, aunque la procesión irá por dentro. Asegura que permanece todo lo ajeno que puede al ruido en torno a su figura, consciente como es del funcionamiento de su profesión y de lo insostenible de la racha de resultados del equipo en las últimas nueve jornadas. Admite que "claro que no me gusta" que se hable de su posible destitución o de la búsqueda de sustitutos, pero deja claro que "no le desgasta". Y se muestra firme para negar las tensiones con el director deportivo Javi Rico, con el que dice que la relación es "excelente".

Así empezó su rueda de prensa el técnico catalán, negando que haya tensión con el máximo responsable deportivo, cuya labor no quiso valorar. "No estoy para entender o no", respondía cuando se le preguntaba si entendía que Rico estuviera buscando sustitutos para el banquillo. "Yo me aíslo. El ruido de fuera no me quita el sueño. Tengo las mismas ganas de siempre y esto no me desgasta", respondía antes de sentenciar que el partido de este viernes "es importante para el Sporting y para la ciudad; no para mí". Ninguno de sus jefes le ha preguntado si se ve con fuerza y capacidad para sacar adelante esta situación porque, afirma, "se me nota".

Se confiesa "motivadísimo" para afrontar esta delicada situación y dice sentir el "respaldo total" de la plantilla, hasta el punto de haber percibido en los entrenamientos una intensidad tal que se ha visto obligado a frenar a los jugadores. Algunos de ellos, cuenta, le han comentado que están convencidos de que ganarán, en un guiño que considera una muestra de apoyo personal.

Admite que "no estamos para pedirle nada a la afición", pero al mismo tiempo está convencido de que "es más fácil que los jugadores rindan bien si se sienten arropados".