(3-0): Un Almería de videojuego

Dulce Navidad para la UD Almería. Si los aficionados querían espectáculo se lo pasaron en grande porque el partido con el Zaragoza tuvo de todo. Primero desesperación por la cantidad de oportunidades que se esfumaban, por la ansiedad de Sadiq, negado en los últimos metros, y por la sensación de que a pesar de generar peligro, en alguna llegada el rival podría llevarse el duelo.

Al final hubo fiesta con la goleada, 45 puntos a falta de una jornada para terminar la primera vuelta y el reencuentro de algunos futbolistas con su mejor versión. El primer tiempo fue de pura paciencia. El Almería lo hacía todo para romper un muro, pero no encontraba la última herramienta, el gol. Sadiq, Arnau, en dos ocasiones, y Lazo pudieron abrir el marcador mucho antes. La flecha seguía hacia abajo pero el Zaragoza conseguía aguantar el 0-0.

Espectáculo

Un golpe de suerte, esquiva para el Almería hasta el minuto 61, lo cambió todo. Contragolpe de manual rojiblanco que no aciertan a cortar Christian ni Francés. Por el área aparecía Sadiq, hasta el momento apagado y desquiciado, para marcar a puerta vacía un tanto con doble lectura. Primero abrir un marcador que parecía encaminado a la igualada, y también por cortar de raíz la racha de siete jornadas sin marcar. Un 2x1 del nigeriano para su tranquilidad y la de los compañeros.

Ahí el Zaragoza se rompió táctica y anímicamente. Rubi lo intuyó con el 1-0 y metió a Ramazani y Robertone. El belga quería brillar y empezó a parecerse al futbolista previo a la lesión que le mantuvo un mes apartado de los campos. Con más de 9.000 espectadores en las gradas, turno para el espectáculo. Dyego Sousa en largo, Largie Ramazani juega de tacón y deja solo a Alejandro Pozo, que define sin problemas ante Christian Álvarez. Partido cerrado.

Aún quedaba el fin de fiesta, y era el gol del belga Ramazani, que se planta solo y sitúa el tercero. La ola, bufandas al aire y ambiente de fiesta en la grada, que ha visto una primera vuelta sin ninguna derrota en el Mediterráneo.

Claves

El Almería era una bomba a punto de estallar, y cuando reventó, se le cayeron los goles. Las oportunidades eran tan claras que solo era cuestión de insistir. Sadiq, nervioso por su racha sin marcar, se quitó un peso de encima aprovechando un error del adversario, y lo más importante, el banquillo iguala o mantiene el nivel de los que hay en el césped. Fútbol de categoría desde el minuto 61. El equipo de Rubi tiene tanto poderío que en cuanto le dejan una vía de escape es capaz de todo.

Impresionante

El Zaragoza claudicó totalmente a raíz del tanto de Sadiq. Había planteado un duelo largo, con pocos goles, para jugar con la presión y la necesidad, no por puntos, y sí por sensaciones, del Almería. Llegan los 45 puntos, un bagaje que firmaría la mitad de la categoría no en diciembre, pero sí en primavera.

Uno de los partidos más completos de la temporada con un resultado que sí va acorde con lo mostrado en el terreno de juego. Recital ofensivo, Fernando, premiado en la previa, un mero espectador. El respeto que le tiene la Segunda al Almería es tremendo. Los puntos, las sensaciones y la trayectoria dan motivos suficientes como para soñar con la vuelta a Primera División.

FICHA TÉCNICA

UD ALMERÍA Fernando, Centelles, Babic, Chumi, Pozo (Villar, 90’), De la Hoz, Samú Costa, Arnau (Robertone, 61’), Portillo (Nieto, 80’), Lazo (Ramazani, 61’), y Umar Sadiq (Sousa, 80’).

REAL ZARAGOZA Christian, Fran Gámez, Francés, Jair, Chavarría, James (Nano Mesa, 45’), Petrovic (Eguaras, 80’), Francho (Iván Azón, 80’), Narváez, Bermejo (Zapater, 66’), y Giménez.

GOLES 1-0, min 61: Umar Sadiq. 2-0, min 85, Pozo. 3-0, min 90: Ramazani.

ÁRBITRO Hernández Maeso.