Santi Mina al rescate en el 118
La Copa le sale cara al Celta que vuelve de Andorra con una prórroga y dos lesionados
Vigo
El Celta tocaba de lado a lado; Javi Galán recibe en banda, busca en línea de fondo a Baeza que saca un centro magistral medido. Arrastra Cervi a dos defensas al primer palo y remacha al fondo de la portería con un buen testarazo Santi Mina. Esto sucedía en el minuto 118 de partido con un Andorra que ya buscaba lanzadores para los penaltis y un Celta desesperado porque sus remates veían portería. Algunos aficionados celestes ya se veían sufriendo desde los once metros y pensaban que ya llega con lo de la Liga como para también tener un día así en la Copa. Así de agónico fue el pase de la Chachoneta a la siguiente eliminatoria. Pero además de agónico fue muy caro: dos lesionados y jugadores que no tienen recambio metiéndose 120 minutos entre pecho y espalda. El doctor Cota se ha ganado un plus de peligrosidad en los tres últimos partidos del equipo. Contra el Valencia se lesionaron Aspas y Solari, aunque este último aguantó. En Mallorca se lesionó Mina y esta noche fueron Kevin y Thiago Galhardo. Se retiraron los dos llorando y abatidos por las lesiones musculares que les pueden restar minutos ahora que los estaban teniendo. Kevin se retiró lesionado en el minuto 15 de partido y Galhardo en el 70 cuando llevaba solamente 20 en el campo. Jugadores como Denis o Mina se han tenido que meter 120 minutos entre pecho y espalda con un partido el viernes contra el Espanyol. Vamos a ver si puede llegar Aspas al choque porque el equipo llega muy justo de efectivos.
Había arrancado el partido con un Celta mandón, presionando bien al Andorra y, fruto de ello, llegó el gol de José Fontán en una extraordinaria jugada individual. Se desmarcó, corrió y se la cruzó perfecta a Ratti. Abría la lata la Chachoneta que parecía, a priori, lo más difícil. Pero esto relajó al equipo y se notó. Empezó a llegar el equipo de Eder Sarabia y la presión celeste ya era más light. Una combinación que provocó hasta tres ocasiones peligrosas que abortaron Rubén Blanco y José Fontán. Pero justo antes del descanso llegó la jugada del gol fantasma que solamente vio el asistente de Jaime Latre. Ninguna toma parece dar evidencia a la decisión de que fuese gol. Pero está claro que sin VAR y sin sistema GOAL LINE, volvemos al método tradicional del ojo de halcón…del asistente, claro está.
Con empate a 1 se llegó al descanso. El Celta volvió a apurar y gozó de numerosas ocasiones pero, a medida que pasaban los minutos, los nervios y las prisas jugaban en su contra. Dos remates de cabeza de Galhardo, Nolito tuvo un catálogo entero de remates fallidos y poca puntería llevaron al Celta a la prórroga. Ahí el Andorra ya pensaba en los penaltis y los celestes metieron una marcha más. Tuvo Nolito una clara de cabeza pero creó muy poco en los primeros quince minutos. Lo siguió intentando en la prórroga hasta que Santi Mina nos evitó los sufrimientos de los penaltis coperos. Una Copa muy cara pero la Copa siempre apetece, porque nos debe una o dos. O incluso tres.