La intensidad del UCAM Murcia CB no es suficiente para ganar al Real Madrid

Murcia

El UCAM Murcia CB recibió al Real Madrid en un duelo accidentado para los blancos. Sin Laso en la parcela técnica, ni Heurtel, positivos en COVID, el mismo día del encuentro se conoció la baja de Causeur por el mismo motivo. En estadísticas, a pesar de los contratiempos, el líder visitó a los universitarios con un 12-1 en la tabla mientras que los de Sito Alonso, cuartos en la clasificación dibujaban un 8-5 antes del partido.

Con 7.600 almas en las gradas, el choque empezó con el Madrid enchufado en el juego interior, haciendo mucho daño a los murcianos con un Goss en estado de gracia liderando a los merengues. Por su parte, los pupilos universitarios se sintieron sobrepasados hasta que Sito pidió tiempo muerto con 5-13 a falta de poco más de seis minutos para el final del 1Q. Ese parón sentó bien a los locales, que empujaron con Bellas y Lima sumándose a la parcela de ataque hasta reducir distancias (17-25).

En el inicio del 2Q se conectó más el UCAM al duelo, con Cate ofreciendo más seguridad en el poste bajo e, incluso, atreviéndose a tirar desde larga distancia. Fue el momento de la verdad con los de Sito tres puntos abajo y todo abierto. Sin embargo, Rudy hizo de las suyas en el perímetro y Tavares se convirtió en una pesadilla en el rebote. El de Cabo Verde impuso su ley bajo el aro en defensa y puso las cosas difíciles a Lima en el emparejamiento. El brasileño no se hizo pequeño, sino todo lo contrario para combatir con sus mejores armas. La mala noticia estuvo en la lesión de Rojas justo antes de la bocina del descanso (35-45).

El 3Q deparó un guion similar, con la calidad individual imperando y decantando la balanza. Sin embargo, el UCAM guardó distancias velando armas en la retaguardia y dificultando las tareas del Madrid al ataque. Los merengues solo hicieron seis puntos en cinco minutos y los de Murcia fueron de nuevo escalando. Taylor lo intentó, pero no tuvo su día y sus puntos se echaron mucho de menos en la parroquia local (52-59).

En el último cuarto el Real Madrid sentó las bases para llevarse definitivamente la victoria. Goss y Poirier hicieron diabluras, como en el resto de partido, aunque fueron anulados en el tercer periodo y echaron el resto en los últimos 10 minutos. Cate volvió a dar un paso al frente, pero la hegemonía blanca en la pista era una seña de identidad que Sito tuvo que frenar con un tiempo muerto con +10 arriba en contra. Poco se pudo hacer cuando Tavares subió revoluciones y, no solo en defensa sino en ataque, reventó las redes de la canasta murciana. Además, Llull sacó la magia a pasear en los minutos finales hasta la última bocina (71-80).

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