Joan Matabosch: "Lo que hicimos en el Teatro Real fue un acto de resistencia"

Madrid

Joan Matabosch se introdujo en el mundo de la música y de la ópera siendo muy pequeño. Alumno aventajado, para los dieciocho años ya tenía todos los títulos del Conservatorio y a los treinta y seis se convirtió en el director artístico del Gran Teatro del Liceu barcelonés, justo dos años después del incendio que casi lo destrozó por completo. Después, asumió la dirección del Teatro Real, donde lleva ocho años dándonos grandes alegrías.

Aunque, confiesa, su intención no era dedicarse a la música. De hecho, empezó la carrera de ingeniería industrial, hasta que el director artístico del Liceu en aquella época quiso que se convirtiera en su adjunto, marcando así el principio de una extensa carrera profesional. "Mis padres no estaban convencidos de que no continuar con la ingeniería, pero a estas alturas tienen claro que fue muy buena decisión".

El coliseo madrileño fue uno de los primeros teatros de ópera del mundo en abrir sus puertas tras el confinamiento. "Tuvimos clara la importancia compatibilizar el seguimiento de las autoridades sanitarias con la búsqueda de formas imaginativas para poder abrir el teatro tan pronto como lo permitiera la situación", asegura. Una decisión que Matabosh defiende como un acto de respeto hacia el público, los trabajadores y los artistas. También, para enviar un mensaje de optimismo en un momento en el que el mundo de las artes interpretativas estaba muy necesitado de perspectivas de futuro. "Lo que hicimos fue un acto de resistencia para apoyar a los artistas", afirma.

La mayoría de las obras que entran al Real cada año se sitúan entre estrenos absolutos y la recuperación de grandes títulos de los siglos XVII, XVIII o XIX. Para Joan es imprescindible que estén ambas cosas: "Que el teatro haga un esfuerzo por ampliar el horizonte con el gusto del público". Así, compositores de todos los tiempos como Rossini, Händel, Puccini, o Wagner se dan cita en esta especial temporada con grandes clásicos, junto a novedades y estrenos absolutos. Entre ellas, una de las funciones más navideñas: La Bohème, de Giacomo Puccini, que está teniendo muy buena acogida entre el público madrileño.

Además, el próximo tres de marzo, el Teatro Real va a homenajear con un concierto a tres grandes compositores que han estrenado en el Real en los últimos veinticinco años: Antón García Abril, Cristóbal Halffter y Luis de Pablo, todos ellos fallecidos este año.

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