Jartura

Jerez de la Frontera

Pocas son las horas que faltan para darle el tirón a la última hoja del

almanaque. Caerá el mes de diciembre del año 21. Caerá el último mes, aquel

en el cual han vuelto a aparecer los secuestros. Los secuestros en forma de

test de antígenos que nos proporcionen el salvo conducto para poder tomarte

las uvas con tus padres, tus hermanos ó tus cuñaos y sobrinos. Los secuestros

en forma de necesaria mascarilla que nos borran las sonrisas, risas y los

cantes en nuestras reuniones y zambombas y hacen tan horribles los besos.

Y creíamos que esto se había acabado…Así lo pensó un servidor,

créanme que incluso así lo anuncié, que no volvería a escribir del maldito

virus. Pues sí otra vez, los miedos, las precauciones, y otra vez y esta vez

fruto de una inesperada ola de frustración, el cansancio y la jartura.

Porque eso es lo que siento JARTURA. Harto de no aprender. Harto

de no conseguir entender por qué llegamos siempre tarde. Harto de que los

que no tienen que llegar tarde lleguen tarde. Harto de no entender que no se

entienda que saldremos de esto antes y mejor si lo hacemos si no juntos, al

menos siendo leales entre todos.

En definitiva cansado de que se haya instalado en nuestra sociedad un

continuo día de la marmota. Harto en definitiva, harto de que nos traten como

niños pequeños en presencia de tanta mediocridad.

Así despediré el año…pero sepan Uds. que en cuanto haya degustado

la última uva del tradicional conteo campanario y una nueva hoja del

calendario se instale en nuestras vidas, allá iré a meterle mano al nuevo año

y disfrutarlo día a día como niño con juguete nuevo.

Así será, sean Uds. felices y que el año nuevo venga pleno de Salud y

Felicidad.