De nochevieja por Aranda

Aranda de Duero

2021 ha sido un año convulso para todos, pero diferente... ¿Mejor o peor? ¿Bueno o malo? Cada uno tiene su opinión, su sentir... Cada uno sabe lo que ha ganado o perdido, lo que ha aprendido u olvidado, pero todos en conjunción desean -deseamos- un 2022 que traiga alegrías, que sea especialmente bueno, y que sobre todo ponga el fin a una pandemia que nos lleva amargando demasiado la existencia.

Este 31 de diciembre nos lleva a mirar hacia atrás, pero también hacia delante. A celebrar que este año, sea como sea, se acaba. Y eso es lo que hoy a través de la radio hemos hecho en nuestro Hoy por Hoy. Llevaros a la pescadería a comprar la cena, pero a la carnicería también. Llevaros a buscar nuestro mejor look para estar radiantes, pero también a endulzarnos el 2022, o incluso buscar la cena lejos de nuestra casa. Un 'garbeo' muy especial que resumimos a continuación.

Menos comensales en las mesas

Las Navidades se trabajan mucho en Freshmar, aunque en ellas hay una importante diferencia entre los pedidos que hay en Nochebuena y Nochevieja. "No nos podemos quejar", dice José Luis González, en todo caso. Lo que sí cuenta el gerente de estas reconocidas pescaderías arandinas, es que "se está notando que las cenas este año son de menos personas", algo que explica con el sencillo hecho de que "estamos teniendo más pedidos pero de mucha menos cantidad".

El lechazo, santo y seña

No solo de pescado viven nuestras cenas y comidas navideñas. La carne es otra invitada más, especialmente en Año Nuevo, donde no puede faltar el típico lechazo. Raquel Rodríguez, de Carnicería Óscar, cuenta que "es el rey de las Navidades aunque hay gente que cambia e innova, pero en casi ninguna mesa -y no solo de nuestra tierra- falta el lechazo". Lo que sí deja claro Raquel es que "la gente tiene más ganas, de verse o reunirse, y venía con otra alegría, aunque muchos pedidos en cuanto a cantidad se han tenido que recortar por confinamientos o personas que vivían fuera no van a venir y se ha notado esa rebaja".

Ponernos guapos, una obligación

Para despedir el año a lo grande no solo tenemos que darnos un homenaje. También estamos acostumbrados a ponernos elegantes. Y en eso la imagen personal hace mucho, y cómo no, visitar nuestros centros estéticos y peluquerías. Encarna Andrés, de Carmen Reguero peluqueros, nos cuenta que "la gente sigue arreglándose, sí se nota una pequeña reducción de trabajos, pero están animados". "Creo que es una inyección personal el sentirse bien físicamente, encontrarse bien con uno mismo, y nosotros también trabajamos para impulsarlo y mentalizarlo", asevera, un poco triste de que 2021 no haya corroborado las intenciones de estos centros de estética de ver rebajado su IVA, y lo que les llevará a seguir sus correspondientes movilizaciones en 2022.

Cenas fuera de casa y mucho dulce

Empezar el año con dulzor es obligado, y más si ese dulce es de la tierra, como el que realizan en Tudanca. En sus salones un 31 de diciembre no faltan tampoco cenas; son muchas las personas que se niegan a pasarse cocinando el último día del año. La aceptación de este tipo de cenas es muy alta, tal y como cuenta Javier Yagüe, pero la correspondiente cena-cotillón que tenían preparado para la noche de fin de año se ha tenido que suspender por motivos lógicos. "Al final decidimos suspenderlo por la situación, lo importante es la seguridad y salud de nuestros trabajadores y clientes pero ya estamos pensando en lo próximo en el calendario, que es San Valentín", sentencia.

Y es que el calendario obliga a mirar al futuro, con la esperanza de que 2022 traiga la estabilidad y normalidad que tanto tiempo llevamos deseando.