Alerta en el Almería: "Nos falta el 50% de la plantilla"

El Covid-19 ha impactado con fuerza en el vestuario de la UD Almería. Así lo ha explicado Joan Francesc Ferrer Sicilia, Rubi, en la rueda de prensa previa al partido con el Cartagena. Desde el club habían mantenido un secretismo total desde la vuelta a los entrenamientos y se debía a los continuos aumentos de casos no solo en el vestuario, sino también en cuerpo técnico y médico.

Los rojiblancos han intentado suspender el choque con el Cartagena, "algo a lo que nuestro rival accedía y le damos las gracias por la comprensión", pero desde las altas esferas "nos han dicho que no se puede aplazar". Una comparecencia en la que Rubi estalló por lo mal que se está llevando la situación en el fútbol profesional: “La semana ha sido desastrosa. No creo que merezcamos lo que hemos vivido, con jugadores que iban causando baja por el tema del Covid-19. Realmente esto es una pantomima”.

"Es una broma"

Explica que hay futbolistas confinados en casa "a los que les cuesta respirar y lo pasan mal". No quiso hablar de brote en el Almería, pero sí de una situación que afecta a toda la sociedad y que el fútbol decide mirar hacia otro lado. El enfado de Rubi aumentaba conforme avanzaba la rueda de prensa: “No lo puedo entender. La situación es excepcional. Nos vamos en Navidad con 0 casos de Covid-19 y a la vuelta todos los equipos detectan casos. Que esto se quiera enfocar como una cosa normal me parece una broma. Los jugadores son personas y están en casa pasándolo mal”.

Muchas ausencias

Las bajas van a ser muy importantes contra el Cartagena. Preparar esta jornada se ha convertido en misión imposible para el entrenador, ya que muchos jugadores que trabajaron el miércoles a las pocas horas daban positivo y ya no podrán competir: “El 50% de la plantilla no está disponible mañana y casi todo por el Covid-19. Ya me dirás qué forma de competir es esta. Hemos intentado aplazar el partido por activa y por pasiva y el Cartagena incluso lo veía con buenos ojos”.

Miedo en el equipo

Reconoce que se planteó parar los entrenamientos para evitar que los casos siguieran aumentando. Los deportistas limitaron al máximo los contactos más allá de la familia tanto en la Navidad como en la vuelta, pero esta ola Covid-19 es incontrolable: “Ves como van cayendo tus compañeros, que hablaste con él, que luego el fisio también cae contagiado... En nuestro caso es injusto que tengamos que jugar esta jornada. La responsabilidad es mía por no suspender los entrenamientos. Jugadores han llegado sanos y han ido cayendo porque se han contagiado aquí. Así no se puede preparar un partido”.

Otro aspecto que le preocupa a Rubi es que puedan darse más casos durante el partido: “Alguno caerá más. A ver qué nos encontramos en las horas previas al partido. La carga viral puede aparecer en el mismo partido y casi seguro que alguno juega incubando el Covid-19”.