Hoy por Hoy PalenciaHoy por Hoy Palencia
Opinión
Opinión

Un buen propósito

La Firma de Tomás Martín

"Un buen propósito", la Firma de Tomás Martín

"Un buen propósito", la Firma de Tomás Martín

02:19

Compartir

El código iframe se ha copiado en el portapapeles

<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1641200672_568803/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>

Palencia

Corría el año 1969 cuando un grupo de candidatos a dar todo por la patria abandonábamos Almería a bordo, quiero recordar, del Vicente Pujol, un ferry de línea regular que cubría el trayecto desde la ciudad andaluza hasta Melilla. En la cubierta del barco, un joven, rudo él, que apenas balbuceaba unas pocas palabras en castellano, sollozaba amargamente pensando que tras aquella travesía nunca más volvería a ver los campos de lo que hoy se ha dado en llamar la España vacía. No hubo forma de consolarlo.

Aquel joven, que aprendería a leer y a escribir en la mili, regresó a su tierra natal sin tener una idea clara de la España variopinta que descubrió en África, crisol de culturas, lenguas, dialectos, localismos y demás -ismos que acompañan al lenguaje. Su única obsesión era reencontrarse cuanto antes con los suyos, con sus prados y sus vacas. Y digo que regresó a su casa sin tener una idea clara de lo que era España porque sus entendederas daban para lo que daban.

Una tarde, refugiados junto a una batería de adormecidos cañones, un grupo de artilleros nos pusimos a divagar sobre la historia de España, la que nos contaron en la escuela y en el instituto y la que más tarde descubrimos en algún que otro libro prohibido. El joven de entendederas limitadas escuchaba con atención todo cuanto allí se hablaba. Cuando ya había hecho progresos con su deficiente castellano, el joven ya no tan rudo preguntó qué era aquello de las dos Españas, de las que había oído hablar.

Recordando esas Españas, viene a mi memoria lo escrito por Claudio Sánchez Albornoz en su obra Mi Testamento histórico-político, que aquí les dejo para que, si les apetece, reflexionen sobre ello: «¿Dos Españas fraternas y enemigas?... Nunca he sido optimista en el curso de mi vida, ni lo he sido al meditar sobre la vida de los españoles, pero quizá podamos trasmutar la bipolarización de las dos Españas en una pluralidad, si no fraterna, de posible convivencia. En una lógica pluralidad de opiniones, de anhelos, de proyectos, de esperanzas. Querer es poder, dice el viejo refrán castellano. Queramos al menos.»

Sería un buen propósito para el año que acaba de comenzar el queramos al menos de Sánchez Albornoz, y así afrontar el largo camino que tendremos por delante, un nuevo tiempo que vendrá no exento de dificultades.

Que todos ustedes quieran y vean cumplidos sus sueños en este recién estrenado 2022.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00