Y Iago Aspas otra vez a lo suyo

Vigo

Iago Aspas es un jugador diferente. El Messi de los pobres; el delantero que es capaz de hacer cosas distintas. Y eso que, a pesar de sus Zarras y estadísticas, siempre tiene que demostrar más que otros y siempre tiene que estar casi mendigando una llamada de la Selección Española. El "No Aspas, no party´ es una forma de vida. Cuando Iago se rompió contra el Valencia nada más marcar, Balaídos se daba cuenta de lo que se podía venir. Y así fue. Cuando regresó contra el Espanyol, el celtismo y el equipo volvieron a sonreír con su gol y asistencia. Aspas acabó el 2021 con gol y asistencia. Aspas empezó el 2022 con un doblete. Ya lleva 10 goles y 2 asistencias. Sin hacer mucho ruido mediático. Y eso que ni el equipo ni él comenzaron la temporada de la mejor forma posible. Pero al Príncipe de las Bateas no hay que subestimarle nunca. Algunos incluso lo daban por amortizado.

Pero, desde la jornada 13, sigue ampliando su leyenda y sus estadísticas. Ese día le marcó un doblete al Barcelona para remontarle un 0-3. El 3-3 fue un gol de una dificultad en el golpeo extraordinaria. Con el cuerpo girado, se acomoda para un chut rápido y con mucho efecto para que Ter Stegen no pueda llegar. Era la última jugada del partido. Ayer nos volvió a dejar otro gol maravilloso. Intuye el cruce del central, esprinta y se le adelanta; le roba la cartera y la posición. Le hace dos cambios de ritmo y mete el cuerpo porque si le toca era penalti. Sienta al portero con facilidad y ejecuta con una sangre fría tremenda. Pareció tan fácil que no se valora en su justa medida la dificultad que tuvo ese gol maradoniano-moañés. Pero Aspas también dejó ese gol extraordinario contra el Valencia antes de lesionarse o la delicatessen del otro día contra el Espanyol con un disparo brutal.

Aspas lleva, en las últimas 7 jornadas, siete goles y 1 asistencia. Y eso que se perdió el choque de Mallorca por lesión y, en el partido contra el Valencia, marcó y se lesionó. Solamente jugó 15 minutos. Aspas lleva, por tanto. 7 goles y 1 asistencia en 5 partidos y 15 minutos. Doblete contra el Barça y Betis, gol en Mendizorroza, gol contra el Valencia y gol y asistencia contra el Espanyol. Con Aspas enchufado el Celta ha conseguido sus mejores números: 3 victorias, 3 empates y solamente 1 derrota. Iago ya está cerca de Juamni que parecía inalcanzable hace algunas semanas. El de Moaña quiere conseguir otro entorchado de máximo goleador español y va a dar la batalla otra temporada más.

A finales de enero vuelve a haber compromiso de la Selección Española pero lo sigue teniendo muy crudo. Es más fácil que vuelva a haber convocatorias como RDT o Rafa Mir. Por no hablar de que Luis Enrique convocó a un inédito Abel Ruiz que no juega en el Braga. Y es que la Selección Española es tabú para Iago Aspas. Ya lo fue con Robert Moreno. Cuando interesa el factor edad se le aplica a él que no a Busquets, Alba o Albiol, por ejemplo; cuando no, pues se le aplica el de “no está en su mejor momento”. Pero si está en su mejor momento, pues se le aplica el criterio de los jugadores que tienen que seguir teniendo confianza pese a no marcar goles. Y si España ya hizo los deberes, pues hay que probar a otros delanteros de futuro o diferentes como Abel Ruiz o que vuelva Rodrigo Moreno. Es lo que le ha tocado vivir. Pero Aspas no va a bajar los brazos. Seguirá buscando su oportunidad. Mientras, en el Celta, seguiremos disfrutando de él.