Desolación y rabia contenida en el regreso de Lointek de Turquía

Bilbao

Lointek Gernika elevará un informe a la FIBA sobre los acontecimientos ocurridos en el partido disputado en Mercin, aunque desde el propio club se tienen pocas esperanzas de que se corrijan las injusticias que denuncian. Su presidente, Gerardo Candina, en los micrófonos de Radio Bilbao, afirma que recogerá toda la información y la hará llegar a las autoridades deportivas. "También digo que no van a considerar repetir el partido. No quiero engañar ni dar falsas esperanzas a los aficionados".

La principal denuncia de los forales radica en el supuesto positivo por COVID que impidió a Belén Arrojo disputar el partido, hasta el punto de que la internacional se ha sometido a una nueva PCR, cuyo resultado ha resultado negativa.

Horas antes de coger el vuelo la federación turca les comunicó que se tenían que hacer una PCR a su llegada a Mercin. Nadie les dijo por qué no valía ni la que se habían hecho en Bilbao, ni la que se hicieron en el aeropuerto de Estambul. Allí les estaba esperando una furgoneta con un enfermero y los botes desprecintados con los nombres ya de las jugadoras. Y apareció el pseudo-postivo de Belén Arrojo que no pudo jugar. Una de sus mejores jugadoras.

Nadie en la expedición de Lointek que viajó a Turquía ha vivido nada parecido. Mario López ya había avisado de que tendrían que ir con mucho cuidado al partido. Sabía que algo iba a pasar. Lo que no se imaginaban es que las cosas empezasen a ocurrir antes incluso de emprender el viaje.

Después, las quejas del Gernika se trasladaban al pabellón donde se escucharon sirenas antiaéreas, bocinas detrás del banquillo, humo dentro...Todo ello generó un infernal ambiente del que Lointek no pudo salir.