Los aparejadores vaticinan un boom de reformas por las dificultades económicas para adquirir vivienda
El sector se recupera tras el año 2020. En 2021 se visaron 2.771 nuevas viviendas en las islas, gracias a las viviendas de lujo y la VPO
Palma
La construcción de nuevas viviendas en Baleares ha recuperado el ritmo de actividad previo a la pandemia gracias a las viviendas de lujo y el impuso de los inmuebles de protección oficial. El año pasado se visaron 2.771 nuevas viviendas, un incremento del 18% con respecto al año pasado y prácticamente la misma cifra que antes de la crisis sanitaria. La recuperación, sin embargo, trae consigo consecuencias negativas: desde el Colegio de Aparejadores y Arquitectos Técnicos advierten de que para un residente en las islas es prácticamente imposible acceder actualmente a la compra de una vivienda nueva.
Según las estadísticas se visaron 1.589 viviendas plurifamiliares de las islas. El impulso de los pisos viene dado principalmente por las obras de vivienda de protección oficial del Ejecutivo balear y por las promociones de alto standing en zonas como el Polígono de Levante de Palma. En el último año también se terminaron 1.182 viviendas unifamiliares, casi la mitad de ellas en el municipio de Calvià y buena parte en manos de compradores extranjeros.
Desde el Colegio de Aparejadores celebran la recuperación del sector, que ha conseguido remontar tras la bajada que se produjo por el estallido de la pandemia y factores asociados como el incremento del precio de los materiales o la falta de suministros.
Su presidente, Luis Alfonso de León, señala sin embargo la importante subida que han experimentado las obras de reforma de viviendas, que han alcanzado las 1.243 y que incluyen cambios estructurales, obras de mantenimiento y ampliaciones. El incremento de estos trabajos ha sido este año del 26% y ha registrado la cifra más alta de los últimos 11 años. Una tendencia que seguirá en ascenso, según pronostica de León, durante los próximos tres o cuatro años. La razón principal es que los ciudadanos nacionales no pueden acceder a la compra de una vivienda nueva por culpa de los precios.
El precio de una vivienda nueva unifamiliar en las islas no baja del medio millón de euros, mientras que es difícil encontrar un piso de obra nueva por menos de 250.000 euros. Sin embargo, la construcción de pisos en viviendas plurifamiliares lleva años sin levantar cabeza porque el mercado nacional no puede comprarlas. El presidente del colegio afirma que los precios de los pisos en Baleares llegan a duplicar los de inmuebles similares en la Península.
La compra de vivienda por parte de extranjeros explica buena parte de la distorsión en el mercado. Sin embargo, desde el Colegio de Aparejadores señalan que el problema tiene difícil solución porque España está sometida a las reglas de la Comunidad Económica Europea y no se puede prohibir la adquisición de vivienda a extranjeros.