Unos 2.000 cuerpos sin registro esperan exhumación en cementerio de Bilbao
Se esperan encontrar hasta cinco veces más cuerpos de los esperados
Restos óseos del cementerio de Begoña
Bilbao
La Sociedad de Ciencias Aranzadi espera encontrar unos 5.000 cuerpos en el antiguo cementerio de Begoña, en Bilbao, cinco veces más de los esperados inicialmente, tras haber exhumado hasta ahora los restos de 2.926 personas, algunas en fosas de la Guerra Civil de 1937, de la época carlista (1836) y otros enterramientos del siglo XIX hasta ahora ignorados.
Aranzadi lleva a cabo desde el pasado mes de octubre, en colaboración con seis universidades, el proyecto del Ayuntamiento de Bilbao denominado "Begoñako Argia", dedicado a investigar la historia del cementerio de Begoña y de la capital vizcaína, antes de que se construya un parque público en lo que fue el antiguo camposanto, que estuvo en funcionamiento desde el siglo XIX hasta el año 2006.
El Ayuntamiento concedió inicialmente una subvención de 325.000 euros a Aranzadi para desarrollar este proyecto científico, aunque, ante el inesperado aumento del número de restos humanos a exhumar, el pleno municipal aprobó ayer la concesión de otros 570.000 euros a esta Sociedad para llevar a cabo una segunda fase de la actuación y completar todos los desenterramientos.
Hasta ahora se han recuperado los restos de 2.926 personas, el triple de lo que se esperaba inicialmente, y se calcula que aún faltan por exhumarse los restos de unas 2.100 personas que se piensa pueden estar enterradas bajo los árboles situados en el perímetro del cementerio, que serán talados. Con ello, se estima que al final del proyecto se quintuplicarán las exhumaciones previstas.
Se han hallado cuatro fosas comunes de las que no se tenía constancia en los registros: una de la época carlista, de 1836, la segunda de este período encontrada hasta la fecha en Bizkaia; una posiblemente procedente de una epidemia de cólera a finales del siglo XIX; una de la Guerra Civil de 1937, la más grande encontrada hasta la fecha en Euskadi, con 46 personas; y una cuarta que no se había hecho pública hasta hoy, con 60 individuos y previsiblemente de inicios del siglo XIX.
Anartz Ormaza, del equipo de Aranzadi y coordinador del proyecto, ha explicado este viernes en una conferencia de prensa que desde las primeras semanas del proyecto, que arrancó el 1 de octubre de 2021, comprobaron que los restos iban a ser muchos más de los calculados.
En el registro del cementerio aparecían 3.067 personas enterradas a partir de 1933, pero los restos de unas 2.500 habían sido ya trasladados, con lo que se esperaban encontrar unos 500 cuerpos, con una estimación inicial de que podría haber otros 500 sin registrar.
Pero en una cata realizada en la zona del cementerio infantil, donde esperaban localizar 84 cuerpos, encontraron 207. Para el final de 2021 ya se habían desenterrado los restos óseos de 1.040 personas, y entre febrero y mayo de 2022 aparecieron las cuatro fosas comunes halladas hasta ahora. Con todo, hace tres días eran 2.926 los enterramientos y pronto se van a superar los 3.000.
En la última de las fosas comunes descubiertas se han encontrado los restos de 60 personas. Aún se investiga el origen de este enterramiento, aunque se sitúa a principios del siglo XIX por una moneda de 8 maravedís hallada junto a los restos, con lo que sería anterior a la inauguración del cementerio.
Ormaza ha explicado que aún quedan por exhumar los restos de unas 2.100 personas enterradas bajo los árboles que crecen en el perímetro del cementerio. Se trata de unos 35 o 40 árboles de unos 20 años de antigüedad, sin interés botánico y que serán talados.
Dejar los árboles hubiera imposibilitado realizar las exhumaciones que faltan, por lo que se ha optado por eliminarlos y sustituirlos posteriormente por especies autóctonas.
Ormaza ha remarcado el aspecto divulgativo del proyecto y ha anunciado que los próximos meses de junio y julio volverán a organizarse visitas guiadas a las excavaciones.
El concejal de Obras, Planificación Urbana y Proyectos Estratégicos, Asier Abaunza, ha señalado que intuían que el proyecto podría deparar "sorpresas" aunque ha añadido que "la realidad ha superado las expectativas", y se ha congratulado por los "buenos frutos" que está dando la investigación, a la vez que ha agradecido el "inmenso trabajo" realizado.
Ha remarcado que se trata de un proyecto que aúna la estrategia municipal a favor de la renovación urbana y la recuperación de la memoria histórica, con la potenciación de Bilbao como "ciudad universitaria" a través del campus investigador establecido por Aranzadi en Begoña.
Esta Sociedad de Ciencias Naturales cuenta en la zona con un equipo permanente de entre 14 y 17 personas -arqueólogos, antropólogos y una criminóloga, entre otros especialistas- apoyado por estudiantes en prácticas -60 han participado hasta ahora- de seis universidades españolas.
La concejala de Salud y Consumo, Yolanda Díez, ha destacado que los restos recuperados en Begoña tendrán un emplazamiento específico en el cementerio municipal de Derio y ha remarcado el "exquisito mimo" con que el Ayuntamiento lleva a cabo esta actuación.
En los trabajos arqueológicos, además, se han encontrado bajo los enterramientos restos de muros y cimentaciones de los cerramientos originales del cementerio y restos de posibles edificaciones defensivas localizadas en la zona, aún por determinar.
"La cantidad de información que estamos sacando es mucho más interesante y rica de lo previsto", ha destacado el investigador de Aranzadi.