Eduardo Torres-Dulce: "Una sociedad moderna se construye sobre la discrepancia y cualquier forma de censura no tiene justificación"

Bilbao

Eduardo Torres-Dulce no visitaba Bilbao desde antes de que se iniciara la pandemia. En esta ocasión, acude como invitado a un cinefórum en la Sociedad Bilbaina que presenta el magistrado Luis Angel Garrido. Se proyecta la película "Su juego favorito", de Howard Hawks, en la que un eficiente vendedor de aparejos ha escrito un manual de instrucciones sobre pesca de caña de gran éxito. No tiene ni idea de pesca, pero nadie lo sabe. Con ese argumento y la metáfora en torno a los profesionales y los aficionados comienza una conversación con este amante del cine. Reconoce que a día de hoy "hay mucha gente que opina de demasiadas cosas, se muestra como experto, y hay un conocimiento superficial". Considera que son demasiadas las etiquetas en torno a un experto en una cosa o en otra, cuando el conocimiento es escaso.

En una entrevista reciente hablaba del abismo de la Cultura y del Derecho y, preguntado por ello reflexionaba asegurando que "una sociedad moderna y avanzada se construye sobre la discrepancia y el debate dentro del marco legal correspondiente, por lo que cualquier forma de censura no tiene justificación". El abismo al que nos asomamos, dice Torres-Dulce, es precisamente ése por el que "le ponemos etiquetas a la libertad", algo a lo que no se puede poner límites más que los más razonables "aquellos que una extraordinaria mayoría pueda permitirse y siempre que las minorías puedan expresarse con libertad". Preguntado por la situación de la Justicia en general puede entenderse, dice, como preocupante porque hemos conquistado en términos de Justicia y de Democracia campos muy importantes que estaban perdidos como el de la presunción de inocencia, la Igualdad o la lucha contra la discriminación y "se quiera o no estamos en unos momentos en los que por las pulsiones del populismo, las pulsiones autocráticas de regímenes, etc...me preocupa extraordinariamente la carencia de rigor en cuanto a los derechos y deberes que existen en Internet, que es un poco como el lejano oeste, un sitio de frontera".

Con Torres-Dulce hablamos también sobre medidas excepcionales y reconoce que cuando suceden ciertos sucesos extraordinarios en un país, si se cree que, de alguna forma, el marco legal ha resultado insuficiente, hay que tomar medidas para ello porque ninguna Constitución es perfecta ni ningún desarrollo constitucional alegal es perfecto. Sería bueno, mantiene, que sucediera si es posible y fundamentalmente sin llegar a legislar a cosas tan importantes con conceptos de enfrentamiento. Se reconoce gran admirador de la Transición Española y mantiene que "España necesita menos crispación, más acuerdos y más querernos a nosotros mismos, como dice Garci, que nos queremos poco".