La pierna amputada en Irun se queda sin dueño
Tras los diez días de plazo, el dueño de la pierna no ha efectuado su retirada del hospital del Bidasoa y ahora se encargará una funeraria autorizada, con la correspondiente multa para el dueño
Operación de cirugía en una imagen de archivo.
Irun
El pasado 6 de septiembre les adelantábamos un caso que ha tenido mucho eco, el del hospital del Bidasoa que recurrió al Boletín Oficial del País Vasco para buscar a un paciente al que le habían amputado la pierna para que pasara a recogerla. Ahora el plazo de diez días para la correcta retirada de la pierna ha llegado a su fin y el paciente no ha recogido el miembro amputado, por lo que el hospital comarcal ha puesto el caso en manos de su central para que actúen bajo el procedimiento establecido.
La retirada de restos amputados debe ser gestionada por el paciente, a través de una empresa funeraria que se hace cargo de su enterramiento o incineración, lo que tiene un coste para el interesado. En este caso, el interesado no ha realizado la retirada, de modo que, según nos explicó el director del Tanatorio Araso, Carlos Fernández, al no haber sido retirado el miembro, el centro se pondrá en contacto con una funeraria autorizada para que se hagan cargo de su debida inhumación o incineración.
Se trata de una práctica de la que más de uno se ha aprovechado, ya que la multa que se les interpone por no retirar los restos es menor a lo que una funeraria puede cobrarles por proceder debidamente.
