La obra 'Ukrania gogoratuz' se instala en la Ekoetxea Urdaibai
Se ha colocado en uno de los muros exteriores del edificio y la escultura, de José Ángel Lasa, está realizada con alambrones traídos de las minas de Donbass
Bilbao
Ekoetxea Urdaibai ha instalado esta semana la obra “Ukrania Gogoratuz” del escultor bermeano José Ángel Lasa. La obra se ha instalado en uno de los muros exteriores del edificio y está realizada con alambrones. Estos alambrones no son ni imágenes ni símbolos obvios de lo que ocurre en Ukrania, pero su autor los ha adoptado metafóricamente porque entiende que en su estado actual ilustran la destrucción, el odio y el dolor que conocemos a través de los medios.
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José Ángel Lasa entiende también que, tal como estaban apilados en el muelle poseían un enorme potencial expresivo, pero ha preferido ordenar el caos y disponerlos constituyendo una especie de unidad sintáctica, sugiriendo de algún modo una solución razonada al sinsentido actual.
Material traído de Donbass
El mineral originario de la obra Ukrania Gogoratuz instalada en el muro exterior de Ekoetxea procede de las minas de hierro de Kryvyi Rih o Donbass. Una vez extraído es transportado en vagones y camiones a las plantas siderúrgicas de Azovstal, Dneprostell Llc o Kametstall, donde mediante el proceso de trefilado el caldo de hierro se convierte en alambrón y es almacenado en grandes rollos.
A partir de ahí, los operarios cortan el material haciendo fajos de diez alambrones que, anudados por sus extremos, acaban formando lo que formalmente son ahora.
Entre tanto, amarrados a grandes y pesadas barras redondas inician un largo proceso de elevación, suspensión, transporte, cargas, descargas, apilamientos y amontonamientos que les han infligido alteraciones, dejándolos estirados, revirados, plegados, doblados, curvados, aplastados y retorcidos.
Recorren así grandes distancias en camiones, vagones o colgados de grúas, hasta que, introducidos en las bodegas de algún barco han llegado hasta Bermeo.
Aspira a ser otro símbolo de resistencia
Hace 85 años, muy cerca de aquí, Franco destruyó la villa de Gernika y masacró a su población. Picasso recurrió a imágenes de personas, animales y objetos para contar metafóricamente lo ocurrido. Al estupor inicial ante el cuadro le siguieron décadas de reconocimiento hasta el punto de que a lo largo del s. XX esas figuras han adquirido categoría de símbolos de resistencia.
Del mismo modo, el escultor José Ángel Lasa ha adoptado estos alambrones como metáforas del conflicto de la destrucción, odio y dolor que afecta al país del que proceden, Ukrania.