El Alavés presentará un presupuesto de casi 40 millones de euros

Vitoria

El descenso a Segunda división ha complicado la elaboración de las cuentas que se van a presentar el día 28 de diciembre en la Asamblea General de Accionistas del Deportivo Alavés. A grandes rasgos, habrá una pérdida de 3,4 millones de euros en la temporada 2021-22, se presentará un presupuesto de 39,5 para la actual donde 20 millones van destinados a gasto de personal, unos 19 de ellos en plantilla.

La deuda financiera reconocida es de 55 millones de euros entre los fondos CVC y las entidades bancarias. En el primer capítulo, son 35 millones que deben devolverse en cincuenta años. Los préstamos financieros con entidades como bancos llegan a los 20 millones y, al haber bajado a Segunda, se activa la obligación de afrontarlos con mayor celeridad que en el caso de haber permanecido en Primera.

Hay unos 19 millones de euros en ayudas a la pérdida de categoría y unos 9 millones en derechos televisivos. El año pasado, el club recibió unos 50 en ese concepto. De hecho, el presupuesto del Alavés fue de unos 72 millones de euros. Para reforzar el patrimonio del club y su consiguiente reflejo en el presupuesto, se aporta una parcela, la E-3, cerca de las instalaciones del Bakh. El beneficiario es ONDARE, empresa para gestionar asuntos no deportivos en la entidad.

La presentación de pérdidas en la pasada campaña responde a tres causas. Según el presidente, Alfonso Fernández de Trocóniz, “hicimos una apuesta deportiva y no vendimos a determinados jugadores porque lo más importante era conseguir la permanencia. Además hubo movimientos con cambios en el cuerpo técnico. La entrada de menos ingresos en general y los últimos coletazos del COVID-19 explican el tener que presentar esos números”.

Guillermo Oraá, Director Financiero del Grupo Baskonia-Alavés, añadió que “la deuda con las entidades financieras pasa de 8 a 20,7 a corto plazo porque se activa una cláusula de afrontar la deuda en un plazo más corto”. El tema de los Fondos CVC tiene su cara B porque son préstamos que van directamente al balance como pasivo, no figuran como ingresos pero en el momento de efectuar los pagos, por ejemplo, a la plantilla, sí aparecen como gastos.