Vitoria ha vivido en 2022 el año más cálido y seco desde que hay registros
AEMET en el País Vasco registró una temperatura media de 13,5 grados en 2022 y apenas 407 litros de precipitaciones

Un trabajador se refresca en una fuente del centro de Vitoria-Gasteiz, como consecuencia de la ola de calor que azota a la peninsula . EFE / L. Rico / L. Rico (EFE)

Vitoria
Vitoria ha tenido en 2022 el año con la temperatura media más alta desde que hay registros. La cifra es de 13,5 grados centígrados durante el pasado año registrados en el aeropuerto de Foronda. "Es el año más cálido desde que hay registros", ha explicado en una entrevista en Hoy por Hoy Margarita Mártin, delegada de Aemet en el País Vasco.
Y no es el único récord del 2022. Además de ser el año más cálido desde que hay registros, ha sido también el año con menos precipitaciones que se tiene registrado. El pasado año cayeron 407 litros de lluvia por metro cuadrado. El mínimo hasta ahora era de 487 litros en 1947, la siguiente cifra de un año seco es de 524 litros en 1961. En 2022, apenas se superan los 400 cuando lo habitual al año suele ser en torno a los 800 litros. Ha llovido la mitad de la media.
"Ha sido un año extremadamente cálido y seco", dice Margarita Martín. La razón está en la persistencia del viento sur a lo largo del año. "A partir del mes de marzo hemos tenido vientos sur prácticamente de forma continuada".
Según los datos que tiene Aemet, los años cálidos y secos se han concetrado en Vitoria a finales de los años 40 y a principios de este siglo.
El 1 de enero con la temperatura máxima más alta desde que hay registros
Y el 2023 de momento va por la misma senda, al menos, en el arranque. Este 1 de enero ha sido el 1 de enero con temperatura máxima más alta desde que hay registros: 19,7 grados centígrados. El anterior récord era del 1 de enero de 2021.
Las temperaturas en todo caso se van a "normalizar", es decir, van a bajar y se van a acomodar a lo que suele ser un invierno en La Llanada. Todavía habrá algunas precipitaciones esta semana y puede que los días 7 y 8 de enero pueda nevar en las zonas más altas del territorio (a unos 900 o 1.000 metros), pero la previsión es que posteriormente se reduzcan las precipitaciones por la llegada del anticiclón de las Azores a la Península, un fenómeno habitual por estas fechas.
Esto va a hacer además que el viento sur toque a su fin y bajarán las temperaturas, aunque no llegará a ser un invierno duro por el momento.




