Pedro Cabezas, víctima "invisible" por partida doble: del GRAPO y gallega
Recordamos con su hija Mayte Cabezas al guardia civil, una de las 120 víctimas del terrorismo de izquierdas a las que la abogada Carmen Ladrón de Guevara dedica su último libro
Capítulo 48 | Pedro Cabezas, víctima "invisible" por partida doble: del GRAPO y gallega
16:53
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
<iframe src="https://cadenaser.com/embed/audio/460/1678213590028/" width="100%" height="360" frameborder="0" allowfullscreen></iframe>
El 10 de marzo de 1989 los agentes de la guardia civil Pedro Cabezas y Constantino Limia estaban de guardia de 24 horas custodiando la sede del Banco de España en Santiago de Compostela. A media mañana, cinco terroristas de un Comando itinerante de los GRAPO irrumpieron en el edificio disparando a bocajarro contra los agentes. Ambos murieron en el acto.
En el capítulo 48 de 'La ventana de la memoria' recordamos a Cabezas con la ayuda de Mayte, su hija, periodista de la televisión pública gallega. Lo describe como "un hombre con mucha vocación, ya que era hijos de guardia civil y nieto de militar. Lo llevaba en la sangre. Tenia vocación de servicio, nunca quiso ascender, quería estar en la calle con la gente. Tenia mucha formación, podía haber hecho otras cosas, pero sentía profundamente su trabajo".
Como padre, prosigue Mayte, "era muy estricto, porque siempre había vivido una vida militar. Tenia miedo de que sus hijas se descarriaran. Siempre nos vio como niñas pequeñas y era súper protector".
El día del atentado, Mayte tenía 18 años. Llevaba veinte días trabajando en la televisión galega. Precisamente se enteró del atentado trabajando. La Producción del programa que presentaba junto a una compañera les ponía un taxi para volver de la boutique que les prestaba la ropa. Así que quedaban para desayunar en una cafetería cercana. Allí escucharon por la radio la noticia del robo del Banco de España. "Nos sumimos al taxi y le dije: llévenos al Banco, porque está mi padre allí y nos lo va a contar todo de primera mano; así cuando lleguemos a la televisión se lo contamos", cuenta la periodista. "Y me encontré con todo el asunto. Fue muy duro. Evitaron que viera lo peor...pero no entendía nada. Lo tengo todo borroso. Entré en shock".
Mayte recuerda mejor los meses que siguieron al atentado. "Tuve que sufrir el acoso de los terroristas en casa. Llamaban por teléfono, se burlaban de mi madre, de nosotras....Era una práctica, al parecer habitual. Nos pincharon el fijo de casa para ver si les pillaban, así que, durante tres meses de duelo ni siquiera tenías intimidad, porque sabías que siempre había alguien escuchando". Cabezas compara con la tortura esas llamadas. "Me parecían tortura. No solo eres asesino y terrorista, para mí eres un torturador. Para mi era inexplicable y lo sigue siendo", lamenta.
Sin ley gallega de víctimas
La joven periodista estuvo treinta años callada sobre lo ocurrido, hasta el homenaje que los compañeros de la Guardia civil rindieron a Cabezas y Limia en 2019. "Era año electoral o preelectoral y fueron invitados o se autoinvitaron muchos políticos. Me llamó la atención porque nunca antes jamás se había puesto en contacto con nosotros o intentado ayudar en algo. Me sentí un poco agredida. Que en campaña vengas a hacerte una foto y reconozcas que no sabias ni que había habido un atentado, ni que había familias afectadas, ni cuántas victimas del terrorismo hay en Galicia...cuando ha habido múltiples reuniones para denunciar que nos sentimos discriminadas respecto a víctimas de otras Comunidades Autónomas, porque allí hay leyes que les amparan, mientras que a nosotros no nos ampara nada".
Mayte les pidió entonces a los políticos presentes que no dijeran nada: "no quería que dijeran que apoyaban a las victimas del terrorismo cuando no era verdad". En ese momento, recuerda, el entonces presidente de la Xunta Núñez Feijoo "se comprometió personalmente de manera muy intima y vehemente a que esta situación había que revertirla y que habría inmediatamente una Ley. Y nunca más., No hay ley ni se la espera". Cabezas reconoce que "tenía esperanzas porque creía que una persona con una responsabilidad tan grande no podía mentirle a la cara a las víctimas del terrorismo".
La hija de Pedro Cabezas es tajante en su conclusión. "Las víctimas gallegas no tenemos ni historia, ni visibilidad. No existimos. Cada vez que vemos declaraciones de políticos diciendo que apoyan a las victimas es como una puñalada en el corazón".
El "Vidas rotas" de los GRAPO
Pedro Cabezas es una de las víctimas del terrorismo a las que la abogada de la AVT, Carmen Ladrón de Guevara, ha dedicado su último libro, 'Las víctimas del terrorismo de izquierda en España', impulsado por el Centro Memorial de víctimas del terrorismo. A diferencia de otros libros centrados en las organizaciones terroristas, Ladrón de Guevara lo que pretende es poner el foco en las victimas.
La necesidad de este libro parte de la experiencia de Ladrón de Guevara como acompañante y abogada de víctimas del terrorismo en la AVT. "Las víctimas de los GRAPO siempre han estado en un segundo plano. Ni los juicios tenían la relevancia de los de ETA", recuerda. Cuando después de hacer el informe sobre los asesinatos de ETA sin resolver, recibió el encargo de hacer lo mismo con las del GRAPO, se confirmó su impresión. "La primera dificultad fue que no había nada escrito, ni siquiera una relación de victimas. Expuse esta situación en unas jornadas de la UPV-EHU y dije: "algún día alguien escribirá el 'Vidas rotas' de las víctimas de los GRAPO". Y allí mismo, el coautor de ese libro, ahora director del Centro Memorial de las víctimas del terrorismo, Florencio Domínguez, le encargó escribirlo.
En el volumen, Ladrón de Guevara rescata del olvido a 120 víctimas de 16 organizaciones terroristas. 93 de esas víctimas fueron asesinadas por los denominados Grupos de Resistencia Antifascista Primero de Octubre, GRAPO, lo que la convierte en la tercera banda terrorista más mortífera de Europea, detrás del IRA y de ETA. Los GRAPO surgieron en el contexto de final de la dictadura franquista y principio de la transición con una agenda de extrema izquierda. Cometieron su último asesinato en 2006 en Zaragoza, matando a la mujer de un empresario, Ana Isabel Herrero. Nunca se han disuelto, aunque después de ese atentado quedaron desarticulados por la Policía. En la actualidad, recuerda Ladrón de Guevara, quedan 18 terroristas de los GRAPO en la cárcel y no llega a la veintena de casos sin resolver.
La reflexión final de 'La ventana de la memoria' es un extracto del discurso que la vicepresidenta de la Fundación Fernando Buesa e hija del político socialista asesinado por ETA, Sara Buesa, pronunció el pasado 22 de febrero en el XXIII In Memoriam celebrado en honor de Buesa y de su escolta Jorge Díez Elorza. "Desprenderse de las semillas de odio, desmontar los prejuicios, rehumanizar la mirada hacia el otro exige colocarse frente al espejo, mirarse, descubrirse y estar dispuesto a cuestionar los propios ideales. Reconocerse para reconocer a otro".
La ventana de la memoria
Eva Domaika
Jefa de informativos en Cadena SER Vitoria. Presenta el informativo diario ‘La ventana Euskadi’. Si...