El Bachillerato de Egibide: Innovación tecnológica y prácticas en empresa
Conocemos algunos de los proyectos nominados a los premios nacionales Don Bosco
Especial Egibide desde Jesus Obrero
Vitoria-Gasteiz
En 2012 nació Egibide, resultado de la unión de Diocesanas y Jesús Obrero, con el mismo objetivo con el que inicio su andadura educativa hace más de 40 años, mantener su tradición y vocación de proyecto socio-educativo. Actualmente en sus aulas aprenden y crecen 7.000 alumnos y alumnas con un docente de 450 educadores, desde los 12 años hasta los cursos de Formación Continua, pasando por el Bachillerato de Formación Profesional en 13 áreas distintas.
Nacho Egizabal, director general de Egibide ha resaltado que desde el centro educativo se quiere "dotar a los alumnos con herramientas para la vida, ya que las empresas siempre nos demandan que los alumnos y alumnos, además de que sepan hacer, cuenten con herramientas para relacionarse y trabajar en equipo". por ahí es por donde pasa el nuevo programa lanzado desde el centro alavés, para "ofrecer una mayor personalización y autonomía al alumnado, previo a incorporarse al mercado laboral", ha indicado Egizabal.
Egibide apuesta por la innovación tecnológica y las prácticas en empresa desde el inicio del Bachillerato, afianzando la futura relación laboral con las empresas, además de contar con varios ciclos de especialización con la novedad del curso de ciberseguridad que se ha iniciado este 22-23. "Queremos incorporar las nuevas tecnologías para que aporten una mejora en la educación, y den nuevas y mayores oportunidades de aprendizaje", ha destacado Xabier López, director de innovación y relaciones institucionales.
Trabajar mediante proyectos
Dentro de este entorno educativo, Egibide lleva a cabo una pedagogía por proyectos, con un modelo de formación diferencial con un objetivo tangible y horizontes reales. "En ESO, a través de proyectos, en Bachillerato, nos centramos en proyectos de investigación que interrelacionan diferentes asignaturas, para tener conocimientos técnicos y otros más trasversales. Mientras en FP se apuesta por dar respuestas de forma colaborativa a diferentes retos, además de desarrollar competencias personales y profesionales que les sirven en su vida diaria", ha explicado Xabier López.
Uno de estos proyectos que ya es una realidad es la guía de buenas prácticas para acompañar a personas con discapacidad intelectual en entornos laborales inclusivos. Proyecto premiado a nivel nacional y reconocido por usuarios y empresas. Oihane Sarasti, formó parte del proyecto que llevó a cabo esta guía y nos cuenta como "no es lo mismo sólo estudiar o viendo un para qué, teniendo esa motivación extra". Así surgió la idea de este bonito proyecto con una "guía que habla sobre qué hacer o como poder contratar a una persona con discapacidad intelectual, con todos los pasos a seguir, y pautas de comunicación con ellos para generar esa confianza entre las personas y las empresas con un trabajo ordinario", ha indicado Sarasti, que a su vez destaca todo lo que pueden aportar y enseñar personas con discapacidad intelectual en el mundo de la empresa y a sus propios compañeros.
No todos los proyectos que se llevan a cabo en Egibide tienen relación directa con las ciencias, y es que también hay mucho que estudiar dentro de la lingüística y cuestiones sociales, como se hace desde el programa Gizabide, mientras el programa Ikerbide se centra más en el ámbito tecnológico y científico. Pedro Rodríguez, profesor de Bachillerato, que imparte el programa Gizabide no cuenta cómo "aprenden de filología y cosas tan alejadas como saber gestionar un excel, hacer una defensa en público del proyecto y cómo hacer las presentaciones digitales".
Este inicio de curso se han presentado dos proyectos a este respecto que tienen que ver con la toponimia. El primero de ellos ha estudiado si Vitoria contaba con más nombres propios en euskera o castellano, y el resultado ha sorporendido como nos ha desvelado, una de las investigadoras, Leire Segura. mientras el segundo de los proyectos se ha centrado en si se entienden mejor o peor los textos en euskera que cuentan con latinismos o palabras que provienen del castellano, un estudio largo que han llevado adelante Shenoa García y Naroa Baena.
Nominados a los premios Don Bosco
Esta semana se están celebrando en Zaragoza las jornadas de presentación de proyectos de innovación para los premios nacional Don Bosco. Hasta allí se han desplazado alumnos y alumnas de Egibide porque sus proyectos de innovación e investigación han sido seleccionados para participar junto a otros del resto de España de Bachillerato y los dos primeros años universitarios.
Los proyectos en cuestión llevan por título y estudio; 'Influencia de la aerodinámica en el vuelo pasivo', y 'La influencia de diversos factores en la formación de esferificaciones de alginato de sodio'.
Egibide Batera y el programa Bilatuz
Aparte de la formación reglada, Egibide apuesta por la formación en valores, de la mano del programa de voluntariado Bilatuz, dirigido por Amaia Achaerandio, y que cuenta con diversos convenios de colaboración con muchas asociaciones de la ciudad. "Egibide Batera, es un proyecto que nace post pandemia para dar cobertura y cubrir las necesidades a diferentes colectivos en problemas, creando sinergia y relaciones muy bonitas", ha indicado Achaerandio.
Naia es una de las voluntarias que se unió al proyecto después de una charla en Egibide, ya que como ella misma nos cuenta, "el voluntariado es gratificante para ayudar y de aprender. Quería aprender dentro del aula y en el ámbito social, para tener conocimiento de otro tipo de realidades". Un proyecto conformado por un grupo de 12 chavales y chavalas que se juntan martes, jueves y viernes en Jesús Obrero.