Un cuaderno de viajes de un ingeniero alemán, recuperado por el Museo de las Encartaciones
G.A. Dick fue un ingeniero y dibujante que trabajó en la fábrica Nuestra Señora del Carmen de Barakaldo entre 1862 y 1866. Durante este tiempo estampó en varios cuadernos de viaje lo que veía
Bilbao
Las Juntas Generales de Bizkaia y el Museo de Las Encartaciones han presentado hoy en Bilbao la exposición “George Alexander Dick. 1837-1903. De Alemania a Barakaldo. El viaje de un ingeniero alemán por Euskal Herria en el siglo XIX” que estará abierta en el museo encartado hasta enero de 2024. En la muestran, destacan los 29 dibujos a lápiz extraídos de una cuaderno de viajes que el joven ingeniero alemán, dibujante aficionado, plasmó en sus marchas por Euskadi y que son una impresionante ventana a paisajes de pueblos de Bizkaia y Gipuzkoa de mediados del siglo XIX. La gran importancia del hallazgo, que ha sido donado por la familia de Dick, es que la mayoría de las estampas y edificaciones que aparecen en estos dibujos no se conocían hasta ahora.
G.A. Dick fue un ingeniero y dibujante que trabajó en la fábrica Nuestra Señora del Carmen de Barakaldo entre 1862 y 1866. Durante este tiempo estampó en varios cuadernos de viaje lo que veía. Siglo y medio después su familia ha legado al Museo de las Encartaciones 29 imágenes inéditas del País Vasco en donde se pueden ver rincones desconocidos de Bilbao, Barakaldo, Sestao, Portugalete, Santurtzi, Getxo, Pasaia, Tolosa, Hernani, Errenteria y Aia.
En esta exposición se muestran estos dibujos, además de otros realizados en Europa y América. La muestra se completa con la historia de la fábrica donde él trabajó (Nuestra Señora del Carmen en Barakaldo, germen de Altos Hornos de Vizcaya), considerada la primera planta siderometalúrgica y el punto de arranque del proceso de industrialización en Bizkaia a gran escala. El museo encartado ha editado en paralelo una publicación con el mismo título, que ha sido elaborada por personal del propio museo y de la Asociación de Patrimonio Industrial y Obra Pública.
Los cuadernos con los dibujos fueron proporcionados por Nicholas Bray, bisnieto de G.A. Dick, y su mujer Josette Acosta, residentes en Donibani Garazi, quienes han estado hoy presentes en la puesta de largo de la muestra. Bray recibió los cuadernos de otra nieta de Dick, Catherine Price-Moss, tras descubrirlos en el camarote de su casa en Inglaterra. Habían estado ocultos más de un siglo.
El asunto adquiere enorme importancia ya que las estampas vascas que aparecen en los papeles de Dick era totalmente desconocidas. En Gipuzkoa dibuja nueve localizaciones de Irun, Aia, Tolosa, Errenteria, Hernani y Pasaia. Y en Bizkaia, Dick se centra en describir con sus trazos cómo eran las márgenes de la Ría y su desembocadura. A través de una veintena de dibujos muestra los siguientes escenarios:
- Vivienda de Deusto.
- Muelle de Portugalete.
- Iglesia, villa de Portugalete y Las Arenas con el molino de viento.
- Pueblo y puerto de Santurtzi.
- Vista global de Abando, Begoña, Deusto y Bilbao.
- Ribera de Barakaldo.
- Vista desde el Pagasarri de La Ría y el mar.
- Vista de Las Arenas .
- Iglesia de Santa María de Getxo.
- Pórtico de la iglesia de Santa María de Getxo.
- Algorta y playa de Ereaga.
- Isla de San Cristóbal y Molino de El Pontón (La Peña/Abusu).
- Fuerte de Arraiz (Abando).
- Convento de San José de la Isla (Sestao).
- Fábrica de Nuestra Señora del Carmen (Barakaldo) y convento de San José de la Isla (Sestao).
- Fábrica de Nuestra Señora del Carmen (Barakaldo).
- Ladera del convento de San José de la Isla (Sestao).
- Entrada a la fábrica de Fábrica de Nuestra Señora del Carmen (Barakaldo).
- Convento de San José de la Isla (Sestao) desde Erandio.
- Punta Begoña y El Abra.
Todos estos dibujos son inéditos y algunos muestran imágenes que se desconocían o se conocían muy poco como la fábrica de Nuestra Señora del Carmen (Barakaldo) junto a la desembocadura del Galindo, el convento de San José de la Isla o diversas tomas de Getxo como el único dibujo que hoy se conoce del molino de viento que hubo en Las Arenas llamado Esazerrota.
Industria de Bizkaia
G.A. Dick también llenó sus cuadernos de anotaciones técnicas tomadas en las empresas donde trabajó. Sus dibujos ayudan a entender la evolución de la industria de mediados del siglo XIX y la influencia de ésta en el desarrollo industrial vizcaíno de esa época. Por este motivo, la muestra recoge un apartado para tratar el proceso de industrialización de Bizkaia a través del relato pictórico de Dick.
Otro apartado de la muestra intenta indagar en la vida de este joven ingeniero alemán. Tras su paso por Nuestra Señora del Carmen (Barakaldo) como Jefe de Laboratorio para modernizar las técnicas de producción de hierro y acero, Dick se asentó en Inglaterra, donde fundó dos empresas. Con una de ellas se hizo rico, ya que inventó un material que le dio fama mundial y le hizo rico, el Delta. En Bizkaia se llegaron a levantar fábricas para producir este nuevo metal.
La presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia, Ana Otadui, ha destacado en la presentación de la muestra que este es un ejemplo del “gran trabajo de recuperación y promoción patrimonial” del museo situado en Abellaneda (Sopuerta). Aunque sea de forma fortuita, ya que los dibujos “estuvieron escondidos más de un siglo en un desván”, se ha logrado recuperar “una parte más de la historia de Bizkaia y de Euskadi”. La cesión de este material “nos ayuda, a través del trabajo de su autor, a profundizar en una época clave de nuestra historia, la de la industrialización y nos aporta información muy valiosa para conocer mejor esa época.” Es por ello que Otadui se ha mostrado “muy agradecida” a toda la familia de Dick, primero por recuperar el material oculto y segundo por cederlo al museo encartado.
El director del Museo de Las Encartaciones y comisario de la exposición, Javier Barrio, ha explicado que la muestra se conceptualiza en cuatro apartados: la biografía de Dick, su relación con la industria vizcaína de la época, los viajes que hizo por el mundo y un apartado con los dibujos y diversa documentación donada por su familia. Precisamente son estos dibujos los que “nos permiten ahora observar cómo eran algunos de nuestros pueblos en una época en el que la fotografía todavía estaba dando sus primeros pasos”.