Tecnología donostiarra al servicio de la salud; De una "tirita" inteligente, a una red de sensores inalámbricos que alerta de una caída de la cama
Son solo dos ejemplos de los avances que la ciencia está aplicando a la salud. Un sector, el biomédico, en el que San Sebastián es referente
Ingevital y Force Repair, dos proyectos de ciencia aplicada a la salud
San Sebastián
Una tirita inteligente que cicatriza más rápido y mejor las heridas, gracias a la bioimpresión, o una red de sensores inalámbricos capaces de detectar una arritmia mientras duermes y alertar de una caída de la cama. Son solo dos ejemplos de las últimas aplicaciones tecnológicas al servicio de la salud, en las que se está trabajando en San Sebastián.
Ingevital
Ayudar a cuidar a los mayores de manera no intrusiva, es el objetivo del ecosistema INGEVITAL, una solución de sensores inalámbricos que colocados en el techo y la pared de una habitación son capaces de monitorizar las constantes vitales de una personas y los movimientos en la cama, alertando al cuidador/a de una posible caída. "A través de radares, que analizan el efecto Doppler sobre las personas, se permite monitorizar las constantes vitales y los movimientos en la cama", explica Laura Ibeas, gerente del proyecto. Todo con tecnología wifi y sin necesidad de que la persona afectada haga nada. "No tienen que apretar ningún botón, como ocurre con el sistema de teleasistencia BetiON", de tal forma que si olvidan ponerse la pulsera y sufren una caída, "nuestro sistema de radares emitiría una alerta que llegaría al cuidador a través de una APP instalada en el móvil".
Ingevital nace como solución a los problemas detectados en residencias, hospitales e incluso en los domicilios de los pacientes. En todos estos lugares, existe un auge progresivo de políticas de no sujeción, que generan problemas a la hora de monitorizar posibles incidentes de los residentes en sus camas, como sentarse o abandonar la misma. Instalados encima de la cama y a través de wifi se obtiene la información en un dispositivo de recolección de datos y se generan las alarmas que se hayan definido.
Laura Ibeas: "Ingevital ayuda al cuidado no intrusivo de los mayores"
"Para la detección de caídas, utilizamos radares con tecnología de identificación KNN, que es capaz de generar un dato de puntos de zonas ocupadas por personas. Así podemos determinar su posición en el espacio y detectar si hay caídas manteniendo la privacidad de la persona, ya que no usamos cámaras de vigilancia", matiza Ibeas.
El programa se está testando ya en dos residencias de Pamplona y Tolosa, y el objetivo es que el próximo año pueda implantarse ya en domicilios. Además han presentado su proyecto a la Diputación para complementar al sistema BetiON.
Force repair
Ellos, los mayores, son los que más sufren también de heridas crónicas, junto a los diabéticos y a las personas con obesidad. Para ayudarles en el tratamiento de esas heridas, llega la "tirita inteligente". Un apósito a base de ácido hialurónico imprimible en 3D que desarrolla junto a otros socios el centro tecnológico Vicontech, dentro del proyecto europeo "Force Repair".
El objetivo del proyecto es avanzar en la curación y tratamiento de las heridas crónicas mediante el desarrollo de un apósito para heridas impreso en 3D. De esta forma, se podría conseguir controlar la infección bacteriana y la inflamación de las mismas. La nueva terapia desarrollada está basada en biomateriales que alivian la tensión cutánea y estimulan la curación y cicatrización mediante la combinación de tecnologías biocompatibles innovadoras con principios activos pro-regenerativos.
Camilo Cortés: "La bioimpresión abre todo un futuro de posibilidades"
El concepto de FORCE REPAIR se basa en un hidrogel autocurativo con propiedades antibacterianas y bioadhesivas, que mantendrá la humedad de la herida durante mucho tiempo. El biomaterial imprimible permitirá la colocación de cada componente en un lugar estratégico para combatir la infección y reducir la inflamación para recrear el entorno de tejido sano. "Al proporcionar un efecto regenerativo prolongado durante al menos 15 días, el nuevo apósito disminuirá significativamente la frecuencia diaria de atención de la enfermera para cambiar el apósito y dará lugar a una herida cicatrizada con una baja probabilidad de reabrirse", nos explica el investigador de Salud Digital y Biotecnología en Vicontech, Camilo Cortés.
El trabajo de Vicomtech en el proyecto se concentra "en el desarrollo un nuevo software de alto nivel para generar las trayectorias de la bioimpresora que permitirán fabricar el apósito multimaterial", añade.
El centro tecnológico también desarrollará un nuevo software que permitirá simular el comportamiento mecánico del apósito, considerando la distribución espacial de los materiales que lo constituyen, así como su respuesta a la estimulación mediante luz ultravioleta, que es lo que permite al apósito deformarse de forma controlada (4D) y liberar tensión en la herida.
Esto supone un gran avance en la gestión del cuidado de las heridas y en la reducción de los costes sanitarios, además de mejorar la calidad de vida de los pacientes.
Naike Bernal Tejada
Redactora de informativos en Radio San Sebastián...