Chillida Leku exhibe 'Lugar de Encuentros IV', un coloso de más de 13 toneladas que desafía la gravedad

Chillida Leku acoge desde hoy la monumental escultura Lugar de Encuentros IV, un gigante grisáceo de hormigón armado de 13,5 toneladas que cuelga de su centro en forma de racimo y desde donde despliega tres robustos brazos que reciben a los visitantes que se acerquen a ella. La obra, situada en el bosque que se extiende alrededor del caserío Zabalaga, presidirá el museo hasta que concluyan los trabajos de remodelación del Bellas Artes de Bilbao, previstos para 2024. Con su puesta en escena, se ha dado comienzo a los actos de celebración del centenario de Eduardo Chillida 100 años.

"Esta propuesta ha representado un reto para todo el equipo del museo" confesaba Mireia Massagué, directora de Chillida Leku. Suspendida por cables de acero, la pieza se eleva unos centímetros del suelo, lo que permite "anular" el peso y hacer levitar la materia. "A través de este proyecto queremos recordar cómo el artista trabajaba en conexión con el mundo industrial, un camino donde la técnica y el saber de la ingeniería se ha vuelto a poner al servicio del arte", añadía. Esta gran escultura es la única de este material expuesta en Chillida Leku.

El donostiarra, que era amante de lo abstracto y de la naturaleza, quedó totalmente cautivado por el fenómeno de la gravedad. Por ello, comenzó a crear piezas de grandes dimensiones en espacios urbanos, para contraponer la masa, el espacio y jugar con la colocación de los cuerpos en el entorno. Así nació la serie Lugares de Encuentro, una colección compuesta por un total de siete piezas, creada entre la década de los 60 y 70. Durante este tiempo, contó con la inestimable ayuda de José Antonio Fernández Ordoñez, ingeniero de Caminos, Canales y Puertos, con quien experimento con hormigones de diferentes elasticidades.

Un proyecto conjunto

Para la creación de la estructura, se ha llevado a cabo un proyecto de colaboración con el entorno industrial de Euskadi, creando distintos grupos de trabajo para abordar retos técnicos y artísticos. Tecnalía ha diseñado la estructura, adaptándola a las condiciones del terreno, mientras que Loire Gestamp ha dado su apoyo para la ejecución e instalación de la pieza.

"Un sueño cumplido"

Entre los asistentes a la inauguración se encontraba Luis Chillida, hijo del artista, quien, emocionado, ha recordado la figura de su padre. Durante su intervención, Chillida ha expresado que con la exhibición de esta escultura, se "cumple un sueño de nuestro aita" para el que "lo que es de uno, no es casi de nadie", ensalzando la generosidad de su padre.

Con motivo de la instalación de la pieza, el quipo del museo está trabajando en una publicación que recoge un texto sobre la escultura, escrito por Miriam Alzuri, conservadora de Arte Moderno y Contemporáneo de Museo de Bellas Artes de Bilbao y que contará, además, con un extracto del texto de Ordoñez en contestación al discurso de ingreso de Chillida como miembro honorario de la Real Academia de las Bellas Artes de San Fernando en 1994 y fotografías de la obra instalada en la zona boscosa del museo.