Conocemos la historia de Guillermina Sancho, virtuosa vitoriana que fue profesora de piano con 15 años
Escuchamos en Hoy por Hoy Vitoria la grabación inédita de uno de las partituras que escribió
Guillermina Sancho García nació en Vitoria-Gasteiz el 26 de septiembre de 1914. Desde muy niña comenzó sus estudios musicales en el colegio de las Hermanas de la Caridad, situado en la calle de Los Fueros. A los once años ya tenía aprobados algunos cursos de solfeo y de piano a los que se había presentado por libre.
En 1928, Venancio Monge y Pilar Fernández de la Mora, insignes profesores del Real Conservatorio de Madrid, aconsejaron a sus padres, que dada la gran capacidad de la niña, fuera enviada a estudiar los últimos cursos de la carrera de piano al conservatorio de Madrid indicando que era lo idóneo “para que fuera completada su educación artística, bajo la dirección de eminentes profesores, y en ambiente adecuado pueda hacerse de ella la artista que prometen sus condiciones.”
La chica era un portento; una gema, que merecía la pena ser tallada musicalmente, para convertirla en un rubí.
Los padres decidieron enviarla a Madrid pero, los gastos que generaba su estancia allí eran cuantiosos, ya que incluía su alojamiento en el internado de la casa-residencia de las Hijas de María Inmaculada, en la calle Fuencarral, por lo que solicitaron a la Diputación de Álava una ayuda económica. En sesiones de la corporación alavesa de 6 de marzo de 1929 y 24 de enero de 1930, le fueron concedidas ayudas para dos cursos, por un importe de 750 pesetas, cada uno.
Andrés Monge, profesor del Conservatorio de Madrid, envió una carta a los padres de Guillermina, el 19 de diciembre de 1929, mostrando su complacencia, respecto a la actitud y aplicación de Guillermina en la capital del Reino: “Veo adelantar tanto a Guillermina en las pocas semanas que trabaja bajo mi dirección, que me apresuro a dirigirme a Vd., para manifestarle mi satisfacción por la marcha de sus estudios pianísticos. Es mucho lo que podemos esperar de la disposición de Guillermina para el piano; y aun más si tenemos en cuenta su corta edad, pues si lo que ahora hace seria de admirar aunque contara bastantes mas años, figúrese Vd. a que punto podrá llegar, si después de terminada la enseñanza, continua trabajando y ampliando sus estudios por tiempo indefinido.”
Guillermina aprovechó muy bien el tiempo y, el 24 de junio de 1930, cuando le faltaban tres meses para cumplir los 16 años, obtuvo el título de profesora de piano en el conservatorio madrileño, con la máxima nota.
PRIMER PREMIO EN UN CONCURSO
El día 3 julio de 1930 Guillermina participó en un concurso destinado a jóvenes pianistas, acto que se celebró en un abarrotado teatro de la Princesa de Madrid. Tomaron parte otros 17 concursantes, con edades comprendidas entre 23 y 25 años, que ejecutaron brillantemente las obras, asistidos por otra persona que se encargaba de pasar las páginas del libreto pautado.
El diario local 'La Libertad' dio cuenta de la actuación de la vitoriana en aquel certamen, en el que sorprendentemente no utilizó partituras, en la ejecución de las composiciones: “Cuando Guillermina se presentó sola en el escenario, se produjo en el público gran expectación. Serenamente, poseída de su dominio de las difíciles y complicadas obras, las ejecutó, de memoria, con visibles muestras de asombro del tribunal y del público.
Al terminar, después de tres cuartos de hora, la hermosísima Sonata número 2 de Weber, obra 39, estalló en la sala imponente ovación, que se reprodujo al hacer mutis nuestra paisanita, obligándole a salir al proscenio hasta tres veces.
Al siguiente día, y como coronamiento del concurso, hubo de ejecutar una obra de repentización, escrita por el tribunal calificador, y lo hizo con genial desenvoltura y perfección. A las nueve de la noche se dio lectura al acta, adjudicándose el primer premio a Guillermína Sancho.entre aplausos ensordecedores.
Nuestra felicitación entusiasta a la joven señorita y a su familia por tan soberbio y definitivo triunfo, deseando que puedan realizarse las indicaciones de eminentes músicos que, al felicitar a esta artista vitoriana, le insinúan la conveniencia de que amplié sus estudios y colme sus aptitudes en el extranjero, vaticinándole éxitos extraordinarios.”
Guillermina deseaba continuar sus estudios en Madrid y en el extranjero, para complementar y perfeccionar sus conocimientos, para lo cual ella misma solicitó el 23 de febrero de 1931 una ayuda económica a la Diputación de Álava.
En sesión de 20 de Marzo de 1931, la corporación alavesa acordó no conceder la ayuda, “pues la consignación presupuestaria para estas atenciones es corta y es mas que lógico que se ayude preferentemente, a los que se hallen en el caso de necesitar recursos para iniciar o continuar los estudios de un arte u oficio, es decir, para los que se encuentren en la situación en la que se hallaba la señorita solicitante en el año 1929”
CONCIERTOS
Tras obtener el título Guillermina dio varios conciertos en Vitoria-Gasteiz, la mayoría de ellos en el Casino Artista Vitoriano, sociedad cultural y de esparcimiento que tenía su sede en un edificio de la Plaza General Loma, y que hoy ya no existe.
El 13 de diciembre de 1931 se celebró por vez primera en Gasteiz, el día de la modista. El acto central de la celebración tuvo lugar en el Teatro Principal de la calle San Prudencio, en el que hubo un desfile de modelos y como colofón un concierto protagonizado por Guillermina, en el que disfrutó de su primer “baño de masas”, cuando ya tenía 17 años.
Se escribió en la prensa local que “quienes hasta entonces no la habían escuchado, quedaron prendados de la fuerte emotividad artística que imprime a las teclas, con una claridad completa en el sonido, elegancia en la expresión melódica y seguridad pasmosa, como una veterana concertista, y sin embargo tan precoz.”
Interpretó una polonesa, de Chopin; la danza numero 6 de Brahms y la rapsodia húngara numero 11 de Franz Liszt. Luego acompañó al piano al tenor local Maximino Lizarralde Garamendi ,originario de Durango, que cantó “La del Soto del Parral”, la romanza “Una furtiva lágrima” y el tango “Cuando llora la mujer”. Los dos artistas fueron largamente aplaudidos por el respetable.
COMPOSICIONES
En la Sociedad General de Autores (SGAE), constan registradas tres obras compuestas por Guillermina, cuyos títulos son: “Espérame amor”,“Solo por ti quiero vivir”,-estrenada en Radio Vitoria el 21 de julio de 1958-, y “Solo tu eres mi vida”. La Biblioteca Nacional de España nos ha facilitado la partitura y letra de esta última, que es un tango, dedicado a su cuñada Esperanza Guridi Pérez, la esposa de Amable Suso Lacha, hermano de su marido.
Esta es la letra:
Son tus enojos como fieras puñaladas
son tus reproches como lanzas que me matan
son tus penas, amor mio, como flechas que me atormentan
y me llegan hasta el alma.
Son tus quejas, amor mio, tan amargas
que solo tus labios, que solo tu boca
me alcanzarán “mi bien” la dulce calma.
ESTRIBILLO
Solo tú eres, mi vida, la esperanza y mi ilusión
solo tú eres la dicha de mi pobre corazón
solo tú eres mi dueño, el tesoro de mi amor
solo por ti, solo por ti, quiero sufrir, quiero vivir.
De ninguna de las tres canciones de Guillermina he conseguido encontrar grabación alguna ni disco, por lo que he acudido a dos buenos amigos expertos en la materia, para que interpreten la melodía. Uno de ellos es Josué García de la Torre Rey, que domina varios instrumentos, y que posee una tienda de música en la que, entre otras cosas, se dan clases. El otro músico que ha grabado este tema inédito de Guillermina es Carlos Díaz Mtz. de Aguirre, que lleva unas cuantas décadas actuando en conciertos, en varios grupos de música moderna.
A continuación podemos ver en un vídeo a Josué, interpretar al piano la citada composición “Solo tu eres mi vida”, con Carlos acompañándole a la guitarra.
Transcurridas varias décadas desde que Guillermina la escribió, muy posiblemente, éste sea el estreno de esa canción en la radio. Tanto Josué como Carlos, han realizado la grabación de un modo 'casero', así que advierten de no es de la calidad deseada.
Al parecer, y por lo datos que se conocen, Guillermina no se dedicó profesionalmente a dar recitales. Sabemos que fue también una experta cocinera, ya que publicó en la revista Celedón, bajo el titulo de “Las Recetas de la Abuela”, numerosas recetas de cocina.
LA BODA
Guillermina Sancho se casó el 5 de octubre de 1937 con Benigno Suso Lacha, hijo de Ignacio Suso González de Alaiza, acreditado comerciante de Maeztu, dedicado principalmente a la venta de ultramarinos, coñacs, aguardientes, carnes y pescados, quien fue nombrado ,en febrero de 1933, alcalde-presidente de la Comisión Gestora, que regía el Ayuntamiento de Arraya (hoy Arraia-Maeztu).
La ceremonia religiosa se celebró en la vitoriana parroquia de San Miguel, ante el altar de la Purísima, que aparecía artísticamente adornado con profusión de flores y plantas, todo ello obra de Juanito Sagarna, el entonces mejor profesional en protocolo que había en la ciudad.
La novia entró en el templo del brazo de su padre, Guillermo Sancho Corrochano, y el novio del brazo de su madre, Julita Lacha, viuda de Ignacio Suso, quien había fallecido el 18 de marzo de 1934.
El novio, Benigno Suso Lacha, fue empleado de la Delegación de Hacienda del Estado y falleció el 28 de septiembre de 1978, a la edad de 72 años. Guillermina murió el 27 de diciembre de 2008, con 94 años.
LA FAMILIA DE GUILLERMINA
El padre de Guillermina, Guillermo Sancho Corrochano, nació en Velada (Toledo) y por su profesión militar, -siendo sargento cuando tenía 25 años de edad-, fue destinado a Vitoria, donde residió desde el 29 de julio de 1899. En junio de 1909 fue ascendido a teniente, en julio de 1918 a capitán y, en julio de 1919, fue nombrado ayudante del general de la plaza.
Se casó en la vitoriana parroquia de San Pedro, con Estefanía García Gavilán, natural de Vitoria, el 28 de abril de 1904, día de San Prudencio, patrono de Álava. Tras el almuerzo, los novios e invitados se trasladaron en varios coches al vecino pueblo de Armentia con motivo de la romería que en honor de nuestro patrón allí se celebra tradicionalmente, participando en el jolgorio, hasta muy entrada la noche.
Guillermo fue una persona totalmente integrada en la sociedad alavesa que compatibilizó su profesión castrense con la de periodista, dedicando una gran parte de su vida a escribir sobre temas, costumbres y tradiciones de nuestro territorio. Mantuvo una buena relación con José Miguel Barandiarán, sacerdote, antropólogo, etnólogo y arqueólogo, autor de numerosas investigaciones.
Colaboró en la revista “Vida Vasca”, de aparición anual, con contenidos principalmente referidos a la cultura, con secciones dedicadas a los territorios de Álava, Bizkaia, Gipuzkoa y Navarra. Fue redactor y director del diario “Heraldo Alavés”; escribió en los diarios “La Gaceta de Álava” y “La Libertad”; ostentó el cargo de presidente de la Asociación de la Prensa de Vitoria. Popularizado sus crónicas poéticas tituladas “Sirimiri”, y uso los seudónimos “Mecachis” y “Concejal del 90”,
El 29 de octubre de 1920 fue nombrado delegado del periódico de Madrid “El Financiero”, dedicado principalmente a la información económica, donde publicó artículos hasta julio de 1929.
Fundó y dirigió la revista “Celedón, periódico circunstancial de fiestas”, que se publicaba anualmente coincidiendo con el inicio de las fiestas de Vitoria. El primer número se publicó en 1918 y el último en 2012, con una interrupción entre 1936 y 1942, por motivo de la guerra civil. Tras su fallecimiento, sus descendientes fueron quienes continuaron editándola.
Desde 1957, por iniciativa de nueve vitorianos, se da inicio a las fiestas de Vitoria-Gasteiz, con la bajada de Celedón, desde la torre de la iglesia de San Miguel. José María Sedano, uno de los nueve, contaba que cuando en 1955 realizaba el programa Gasteiz en Radio Vitoria, en compañía de Javier Azpiazu, “se plantearon una interrogante ante el micrófono: ¿Por qué no se lanza a Celedón sobre la Plaza de España en el chupinazo del 4 de Agosto? En la revista “Celedón” de 1923 habíamos visto un dibujo de “Cele” con blusa, txapela y paraguas con este ripio: Celedón llega a Vitoria procedente de la gloria”. Una viñeta y una frase en la revista de Guillermo Sancho, les sirvió de inspiración, para iniciarse la bajada del personaje, que hoy es ya una tradición.
Guillermo escribió varias obras teatrales: el 15 de enero de 1906 estrenó en el antiguo Teatro Principal, hoy desaparecido, un juguete sin música titulado “Alma en pena”. El 8 de febrero de 1906, en el mismo teatro puso en escena un monólogo titulado “Cuidado con los maridos”, escrito en verso; en septiembre de 1918 se escenificó su obra, “La carta de la Ruperta”.
Guillermo falleció en Vitoria el 23 de junio de 1942, a los 68 años. Se estaba ocupando esos días de preparar el número de su revista “Celedón”. Su esposa Estefanía murió el 24 de febrero de 1944, a los 67 años.
En 1978, la comisión municipal creada al efecto, examinó tres propuestas para la concesión del Celedón de Oro, uno de los galardones mas importantes que se concede todos los años, a l@s vitorian@s mas destacad@s. Una de ellas, sugería conceder el premio a Guillermo Sancho Corrochano, a título póstumo, por “haber sido el creador de la figura de Celedón”, pero la iniciativa no salió adelante.
Guillermo Suso Sancho, nieto de Guillermo e hijo de Guillermina y del comerciante de Maeztu, se licenció en ciencias económicas y fue profesor en la Escuela de Ingeniería Técnica Industrial de Vitoria. Accedió al cargo de Diputado Foral en la primera legislatura democrática del ente foral (1979-1983), presidida por el Diputado General Emilio Gebara Saleta, tomando posesión del puesto el 12 de mayo de 1979.
