Familias y profesores valoran el protocolo de detección de Altas Capacidades aunque piden más formación
Probada ya la primera de las tres fases entre el alumnado de primaria, se preguntan por la atención una vez detectados nuevos casos
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Bilbao
Lide Irazu tiene 15 años, estudia cuarto de la ESO en el colegio Mary Ward de San Sebastián y tiene Altas Capacidades Intelectuales. Es lo que coloquialmente conocemos como "superdotada". "Fue a los 8-9 años cuando me lo detectaron", ha explicado en A vivir que son dos días Euskadi. Mostraba mucha curiosidad por todo, le gustaba en especial la naturaleza y, en ocasiones, se quedaba en su habitación leyendo y estudiando durante horas. Es una alumna brillante. "Tengo todo sobresalientes menos un notable", cuenta, pero no todos los alumnos con Altas Capacidades son así.
Lide fue afortunada ya que el centro en el que estudia, ante el elevado número de casos de Altas Capacidades, puso en marcha un programa pionero de detección. De los 500 alumnos de primaria y secundaria, hay al menos 39 casos detectados, lo que representa el 7,8% del total. Y podría haber más, ya que, en ocasiones, son las propias familias las que prefieren no admitir la realidad de su hijo. María Ripalda, profesora del centro y experta en Altas Capacidades, sostiene que "no todas las familias son iguales y responden ante nuestra sospecha de diferente manera. Generalmente reaccionan con incertidumbre, miedo, ideas que ya traen preconcebidas, etc. y es algo que hay que cotejar poquito a poco dando respuesta a cada una de esas situaciones".
Protocolo de detección
El Gobierno Vasco ha puesto en marcha un protocolo de detección destinado a este colectivo de alumnos. Consta de tres fases y acaba de probarse en el alumnado de primaria. Concluida la primera fase, han comenzado ya con la segunda y ahora arranca el protocolo entre los estudiantes de sexto. Según el Departamento de Educación, hay detectados 937 casos de Altas Capacidades Intelectuales entre los alumnos no universitarios en Euskadi, el 0,25% del total. Desde la asociación Aupatuz, valoran positivamente el protocolo aunque echan en falta mayor formación y sensibilización del profesorado tanto para la detección de casos como para la intervención una vez detectados. Preguntado el Gobierno Vasco, prefiere esperar a la presentación de las conclusiones oficiales dentro de unas semanas.
En ocasiones, la detección resulta más compleja ya que los perfiles son muy diversos. Telmo Robredo Erostarbe tiene 18 años y tenía unos 11 años cuando le dijeron que tenía Altas Capacidades. Según ha contado en Cadena SER Euskadi, "tenía muchos problemas para concentrarme y tampoco se me daba ninguna asignatura muy bien". Poco había oído hablar del tema aunque no supuso ningún problema para él, de hecho, hoy lo tiene muy interiorizado. Estudia primer curso de LEINN (Liderazgo Emprendedor e Innovación) en Mondragon Unibertsitatea. El sistema de aprendizaje, diferente al de la ikastola, se adapta muy bien a su forma de ser y está muy contento.
Telmo Robredo Erostarbe en las inmediaciones de Mondragon Unibertsitatea donde estudia / Cadena SER
Telmo Robredo Erostarbe en las inmediaciones de Mondragon Unibertsitatea donde estudia / Cadena SER
Una de las características de estos jóvenes es la curiosidad. Desde edades muy tempranas muestran mucho interés por temas más propios de adultos, como la muerte o el sentido de la vida. Algunos de ellos también son muy activos y eso supone una mayor dedicación por parte de los padres y madres. Para Diana Ferrera, madre de tres hijos, dos de ellos con Altas Capacidades, es un orgullo aunque reconoce que el día a día en casa resulta a veces cansado.
