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Sociedad | Actualidad

El mal estado de la Iglesia de San Andrés obliga a cerrar sus puertas

La estructura del tejado se encuentra dañada y el párroco reconoce que puede pasar "mucho tiempo" hasta que se vuelva a abrir

El templo eibarrés permanece cerrado desde el sábado ante el riesgo de caída de piezas de la cúpula / Cadena SER

Eibar

La Iglesia de San Andrés de Eibar cierra sus puertas debido al mal estado de la estructura del tejado. Desde el pasado sábado, las misas y los funerales que se celebran en ella se han trasladado a otras iglesias del municipio.

Debido al estado deteriorado y hasta que no se llevé a cabo una reforma, la iglesia de San Andrés cerrará sus puertas a los feligreses por el peligro que puede suponer acceder a ella. Tras el desprendimiento de cascotes en la calle y por la seguridad de los devotos, la parroquia ha decidido suspender las misas.

Detalles de la fachada de la iglesia de San Andrés

Detalles de la fachada de la iglesia de San Andrés / Cadena SER

El párroco, Pedro Laskurain apunta que la Iglesia se encuentra en una “situación grave” y que la estructura del tejado no está distribuyendo bien su peso ni está bien estabilizada: “Esto provoca que la bóveda no esté consolidada y que se pueda desprender alguna piedra”, advierte.

Pedro Laskurain, párroco de la Iglesia de San Andrés

Además, hay que recordar, que, el pasado mes de enero, se desprendió una piedra de 40 kilos de la bóveda que dañó el órgano de la parroquia, la cual acabaron arreglando, y señalan que esta vez, debido al riesgo que puede suponer que vuelva haber más desprendimientos, se suspende temporalmente el acceso.

Por otra parte, desde la Diputación Foral de Guipúzcoa han mostrado disposiciones para llevar a cabo la reforma del tejado y la estructura de la Iglesia y subrayan que es un acto de carácter prioritario. “Desde el primer momento tanto la diputación como la diócesis pusieron los recursos que hicieron falta para analizar correctamente cuál era la situación y ahora valorarán el proyecto que permitirá que la iglesia pueda volver a abrirse”, apunta María José Tellería, diputada de cultura.