Victoria contundente por veinte puntos (92-72)

Vitoria

El club azulgrana anunció a bombo y platillo la "Nochentera", la canción que ha movilizado gran parte del mundo este verano y que aspiró sin suerte a Eurovisión. De ‘noche entera’ se le hizo al Bilbao Basket a partir del minuto 15, cuando los vitorianos sacaron el rodillo y Moneke, que es un espectáculo en sí mismo y se sumó al programa verbenero, impulsó a los azulgranas hacia la paliza. El ‘cuatro’ de las rastas y las gafas la va a reventar esta temporada en la ACB, rodeado de un equipo con más calidad y físico que en Manresa hace dos años y tan descontrolado como éste.

El Bilbao Basket recibió una mala noticia hace tres días. El Baskonia perdió en Murcia y andaba apretando los dientes de la rabia. Se preparó un largo guateque para el estreno en casa en la tercera jornada y quiso estar a la altura. La traca más importante en todos esos fuegos de artificio tenía que ser un triunfo impactante ante el vecino del norte. El Bilbao Basket, animado por su estreno ante el débil Andorra, aguantó bien el cara a cara en el primer cuarto. Howard era de nuevo indefendible, pero el equipo tenía puntos para sostenerse en el marcador, especialmente intentando llevar el choque al cinco contra cinco. Los alaveses no acababan de encontrar el acierto en ataque, eran muy respetuosos con el enemigo, que venía de una buena pretemporada, aunque algo coja por la suspensión de dos partidos.

Los de Joan Peñarroya sufrieron para asegurar su rebote ante un Bilbao Basket que centró sus esfuerzos en surtir de balones a Killeya-Jones, que castigó a sus pares en un primer asalto que acabó con los visitantes por delante, 18-20. Pero a continuación en un par de chispazos, el conjunto de Peñarroya sacó a relucir las debilidades de los bilbaínos, que mostraron sus dudas de equipo nuevo, sin una respuesta física ni mental a la altura de la exigencia. Gran partido de Howard, con 16 puntos, y de Moneke, intenso, dando el espectáculo en incluso pasando la mopa.

Los locales empezaron a correr y dejaron el asunto ventilado. Al descanso, 18-0 al contraataque. Muchas transiciones a partir de la férrea defensa y gracias a que los ‘hombres de negro’ no cuidaban la pelota. En el segundo cuarto, el equipo de Ponsarnau hizo un 2/9 en dobles y 1/5 en triples. En cuanto el Baskonia subió líneas y se endureció en defensa, dejó sin respuesta al rival. Con 15.000 gargantas animando a rabiar no se puede fallar. Fue la noche del baloncesto, Vicco, la Nochentera, Maldita Nerea y Juan Magán. "Creo que la gente se lo ha pasado bien hoy", llegó a decir luego Joan Peñarroya en la sala de prensa.

La segunda parte incorporó el baile a la música que atronaba por todas partes en el recinto azulgrana. El baño se fue hasta el 81-53 a 5:32 para acabar, con una canasta doble de Rogkavopoulos. Moneke seguía a lo suyo, la anarquía al poder: puso un taponazo por la estratosfera a Smith, que no acababa de encontrarse a gusto. Ponsarnau lo veía tan negro que puso a Kullamae de base, porque Renfroe y Pantzar estaban pasando las de Caín. Solo cuando Peñarroya dio descanso a sus figuras y puso en liza a Díez y Raieste pudo llegar cierto maquillaje visitante, con un 3-13. Kullamae conectó con Hlinason y el Bilbao Basket salió con respiración para pensar en el Obradoiro, rival de esta semana.

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92 - Baskonia (18+22+27+25): Miller-McIntyre (9), Howard (16), Sedekerskis (7), Costello (4) y Diop (10) -cinco inicial-, Mannion (3), Raieste (-), Rogkavopoulos (13), Marinkovic (11), Díez (-), Kotsar (5) y Moneke (14).

72 - Surne Bilbao Basket (20+11+16+25): Renfroe (3), Adam Smith (11), Rabaseda (4), Tsalmpouris (-) y Hlinason (13) -cinco inicial-; Pantzar (-), Kullamae (12), Alex Reyes (9), Andersson (8), Killeya-Jones (9) y De Ridder (3).

Árbitros: Jordi Aliaga, Javier Torres y Jorge Martínez. Sin eliminados.