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¿Es caro morirse en Euskadi?: "Con lo que la persona fallecida pueda tener en su cuenta se cubre perfectamente"

En Euskadi el año pasado, y según datos del Eustat, perdieron la vida casi 24,000 personas. En el Día de Todos los Santos nos preguntamos qué coste puede llegar a tener un funeral en nuestro territorio

¿Es caro morirse en Euskadi?

En Euskadi a la persona fallecida, por norma general, se le conmemora con rosas, claveles, gladiolos o margaritas. Precios que pueden variar desde los 124 euros hasta por ejemplo, los 248 si hablamos de un ramo con 36 rosas. Y en lo que se refiere a ataúdes los precios pueden variar desde los 800 a los 8000 mil euros. "Bueno yo creo que es caro morirse en todos los sitios, lo que sí que es cierto es que en algunos sitios es algo más caro que en otros. La media de lo que puede ser un servicio funerario es de 3.700 euros. En ese sentido la media de Bilbao es bastante parecida: si lo que vamos a hacer es inhumar la cosa andaría por los 3.900 euros, por su parte incinerar costaría algo menos", comenta Kepa Loizaga, delegado de la Organización de Consumidores y Usuarios en Euskadi. ¿Y qué es lo más caro en un funeral? "En un funeral hay muchos añadidos, un féretro ronda los 2.200, las esquelas 320, el personal de servicio 290, un coche fúnebre 200 euros, la tramitación y las gestiones también 200 y las flores 186", desglosa Loizaga.

Y preguntamos también a la otra parte, al tanatorio de Bizkaia. Nos atiende su directora, Mailen Uribelarrea. Sobre si es accesible enterrar a alguien en Euskadi nos dice que: "por nuestra experiencia muchas veces los gastos de un servicio funerario con lo que la persona fallecida pueda tener en la cuenta desde luego que se cubren perfectamente, en la mayoría de los casos". En este caso, este tanatorio cuenta con un "básico que no va a superar los 2500 euros", comenta Uribelarrea. Y partir de ahí, según dice, lo que cada uno pueda llegar a necesitar.

Gasto de un funeral

¿Y si alguien no tiene dinero para costeárselo?

Pueda darse la situación que una persona no pueda hacer frente al gasto que le supone enterrar a un familiar, en cualquier caso es algo poco corriente gracias al fenómeno de los seguros. "Es poco habitual y es que el 47% de la población tiene un seguro de decesos, es el cuarto seguro más habitual. Son estos seguros los que van cubriendo estos gastos, aunque también es cierto que no todo el mundo lo tiene contratado".