"Es necesario afrontar el duelo y hablar de esas personas que ya no están, porque es sanador"

Vitoria-Gasteiz

Estas navidades en muchos hogares habrá 'sillas vacías', y pocas ganas de celebraciones, cantar villancicos e incluso juntarse. Situaciones de pérdida difíciles de afrontar y para las que nadie tiene la receta idónea e ideal, pero que desde la asociación 'Vivir con voz propia' "animan a que se vivan con normalidad y sobre todo hablando de esas personas que ya no están, porque es sanador", como nos cuenta Patxi del campo, miembro de la asociación.

Las fiestas navideñas para la mayoría de las personas es motivo de reencuentros familiares, alegría y mucha diversión; pero para aquellas familias que han sufrido la muerte de un ser querido, se trata de tiempo muy difícil, de nostalgia, sufrimiento e incomprensión. Para aquellos en duelo todos estos momentos despiertan sentimientos de aflicción por la ausencia de la persona fallecida más que en ningún otro momento del año, es el momento en el que surge la pregunta, ¿Qué sentido tiene la celebración de estos días? Ante esta situación la psicóloga María Jesús Jiménez destaca dos palabras clave, "hablar y recordar, hablar, preguntar y apoyarnos en el resto de miembros de la familia con los que decidir que hacer en estas fechas, y recordar, que no es otra cosa que volver a traer al corazón a la persona que ya no está. Este es el mayor regalo que nos podemos hacer".

“Es Navidad y en casa hay una silla vacía”.

Desde 'Vivir con voz propia' ha organizado, por tercer año consecutivo, la jornada: “Es Navidad y en casa hay una silla vacía”. Una jornada "en la que se viven muchas emociones, y en la que tratamos de encender una luz y compartir experiencias, no sólo la silla vacía, sino que este también en esta edición la cuna vacía", ha indicado Patxi del Campo. Además, ha recordado que "lo más importante es acoger y compartir, muchas veces sin decir nada más que abrazar y que la otra persona sienta ese apoyo. No hacen falta palabras, ni frases hechas que en la mayoría de ocasiones no ayudan".

Algunos de los consejos que nos propone la psicóloga María Jesús Jiménez pasan por "ordenar nuestras emociones y hablarlo, porque es la manera de dar con ese mensaje de esperanza y luz. Además de "usar estas fechas para recordar a la persona que se acaba de ir, poniendo un plato más encima de la mesa o haciéndole un regalo", ha explicado Jiménez que también se ha referido al duelo perinatal y neonatal, ya que parece que "no nos dejan llorar por alguien al que no hemos conocido, sentido o tocado, es un tema tabú".

"Decidimos que nos quedábamos en Vitoria y es lo mejor que pudimos hacer"

Antonio Errasti, nos ha contado su caso en primera persona, cuando perdió a su mujer después de un cáncer y lejos de marcharse de Vitoria en las fechas navideñas "no queríamos recordar todo lo que había pasado, pero luego nos dimos cuenta que nos vino fenomenal, porque ella estuvo presente en todo momento, contando las vivencias que tuvimos con ella y lo que hacía", y recuerda que "lo bueno es hablarlo y soltar todo para cubrir ese vacío", ha explicado Errasti.

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"La experiencia que tengo es que hay que hablarlo y naturalizarlo, porque la muerte es algo natural y hay que quitar todo el oscurantismo que hay, tenemos que darle visibilidad", ha indicado Antonio Errasti ante el miedo y tabú a hablar sobre la muerte y la silla vacía estas fechas navideñas.